Rosario Velasco, concejala de Vox en el Ayuntamiento de Albacete, ha anunciado que abandonará el partido verde cuando concluya la legislatura, a finales de mayo, porque, según ha destacado, desde que se convirtió en la única edil de la formación verde en el consistorio albaceteño, comenzó a sufrir amenazas desde su propio partido. Habla de sufrimiento durante estos casi cuatro años de "trabajo incansable para mejorar la vida de los albaceteños".
Según Velasco, ella no dimitió de su cargo como presidenta provincial de Vox. Asimismo, ha explicado que las coacciones se convirtieron en insultos que ha detallado. Entre ellos la califican de "hija de puta" y, según la concejala albaceteña, querían acabar con ella desde el primer día.
Velasco ha reiterado su "pena y decepción" por el rumbo que ha cogido un partido que, según dice, no reconoce y que está generando "bajas, desilusión y decepción" en sus afiliados.