Sorprendente descubrimiento en el yacimiento protohistórico de Los Almadenes, en Hellín
Se ha descubierto un gran almacén en el yacimiento. Se trata de un gran edificio en el ángulo noreste de la fortificación, con acceso desde el mismo pasillo de la puerta de la muralla y una curiosa disposición interna que apunta a que fue un espacio dedicado al trasiego de bienes.
El equipo de arqueólogos del Instituto Universitario de Investigación en Arqueología y Patrimonio Histórico (INAPH) de la Universidad de Alicante ha concluido los trabajos de campo en Los Almadenes, en Hellín (Albacete).
Los investigadores Pascual Perdiguero, Patricia Rosell y José Luis Martínez, dirigidos por la catedrática Feliciana Sala, han comprobado sorprendentemente que, en lugar del torreón que hubiera sido preceptivo, ha aparecido una construcción extensa con compartimentos completamente abiertos a un patio.
La entrada y salida de este espacio se fiscalizaría en la propia puerta principal de la fortificación, configurada como un muelle de carga y descarga, algo que ya comprobaron en la campaña que realizaron el año pasado y que continuarán en 2022 avanzando en esta hipótesis.
Este edificio de almacenaje es un elemento más para confirmar el carácter productivo del asentamiento del que, por otros datos, los investigadores saben que se dedicó a la extracción del azufre del histórico coto de Las Minas durante la primera mitad del siglo VI a.C. El compartimento de este gran edificio excavado ahora en septiembre, el primero junto a la puerta, en lugar de ánforas almacenadas, ha deparado un conjunto de vasos cerámicos asociados al servicio de mesa y la manipulación de alimentos dispersos en torno a un hogar.
En la campaña de 2022 el equipo procederá a analizar sus contenidos, una "valiosa información" para aproximarse a la vida cotidiana en el enclave. Frente a la idea aceptada de crisis política y económica en el siglo VI a.C. en toda la cuenca del Mediterráneo antiguo, Los Almadenes ofrece a la ciencia arqueológica una imagen diferente.
Según las investigaciones, se trataría de un lugar fundado ex novo para obtener una materia prima costosa y, por ello, el esfuerzo en construir una fortificación eficaz; y capaz de organizar el transporte del producto de forma segura descendiendo desde el Alto Segura hasta un punto de la costa sureste.
De esta forma, el azufre se comercializaría entre las potencias que se disputaban el control del Mediterráneo y su navegación. Las excavaciones recién finalizadas, que cuentan con financiación del Ayuntamiento de Hellín y del Instituto de Estudios Albacetenses, son la continuación de los trabajos iniciados en 2016, que regresaron en la campaña de septiembre de 2020.