¿Qué hacemos si nuestra mascota sufre un golpe de calor?
Es fundamental que su cuidador se encargue de buscar un lugar con sombra y un ambiente tranquilo donde resguardarle y mojarle por encima con agua
Con la llegada del verano y de la subida de las temperaturas, se debe prestar especial atención al cuidado de nuestras mascotas, ya que son muy sensibles a las temperaturas extremas, pudiendo provocar graves golpes de calor que ocasionen daños a todos los niveles: sanguíneo, gastrointestinal, urinario, neurológico, cardiovascular y pulmonar, con el consiguiente fallo multiorgánico. De hecho, puede llegar a producir la muerte del animal.
Los golpes de calor pueden presentarse de manera individual, temporal o permanentemente. “Cuando los animales sufren un golpe de calor empiezan con muchos jadeos, muchas veces roncan porque tienen un paladar muy largo que les ocluye el acceso a la vía respiratoria y eso produce este sonido. Si esto no se soluciona de forma rápida, este jadeo no es capaz de compensar el aumento de temperatura y empieza a subirles mucho la frecuencia cardiaca, se van debilitando y quizás no puedan levantarse”, destaca Isabel Mendoza, Veterinaria especialista en UCI y Urgencias de AniCura San Fermín Hospital Veterinario.
Si el animal sufre un golpe de calor, es fundamental que su cuidador se encargue de buscar un lugar con sombra y un ambiente tranquilo donde resguardarle y mojarle ligeramente con agua, hidratando zonas de abdomen, axilas e ingles. “Nunca usaremos toallas empapadas sobre el cuerpo, ya que éstas impiden la disipación total del calor, tampoco sumergiremos al animal en agua ni colocaremos placas de hielo, ya que pueden producir quemaduras en la piel. Asimismo, no debemos superar una bajada de temperatura de 0’5ºC/h y debemos finalizar el enfriamiento cuando la temperatura se encuentre en 39’5ºC para no producir una hipotermia brusca”, explica Mendoza.
Para evitar llegar a este punto, los cuidadores deben conocer la raza del animal, así como su carácter y actividad, con el objetivo de cubrir todas sus necesidades. “La prevención es fundamental. No se debe dejar a los animales dentro de coches en verano ni realizar paseos o ejercicio intenso en momentos de alta temperatura. Recomendamos paseos largos a primera hora de la mañana o a última de la tarde y si en estos paseos hay acceso a agua, un buen chapuzón no les viene nada mal”, subraya.
Los factores que pueden empeorar el pronóstico son un estado mental alterado, hipoglucemia, alteración de la coagulación, afectación renal, crisis convulsivas y estado ácido-base del paciente. En este sentido, la respuesta a la terapia agresiva en las primeras 12-24 horas resulta fundamental en la mejora de su pronóstico. Por ello, es muy importante llevar a nuestra mascota cuando antes a un centro veterinario de urgencias para valorar posibles daños a los que se pueda enfrentar el animal y solventarlos en la mayor brevedad posible.