Hospital de Albacete

Albacete incorpora el uso del plasma rico en plaquetas para tratamientos en la Unidad del Dolor

La Gai suma esta técnica a otras terapias complejas que realizan para el control del dolor

Redacción

Albacete | 25.08.2023 06:04

Imagen de archivo de un hombre sufriendo dolor de cabeza | Pexels

La Unidad del Dolor del Servicio de Anestesiología y Reanimación de la Gerencia de Atención Integrada de Albacete, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), ha comenzado a utilizar el plasma rico en plaquetas (PRP) para el tratamiento del dolor.

Se trata de una nueva prestación con la que la unidad, que realiza otras terapias complejas para el control del dolor, aumenta su cartera de prestaciones.

Tal y como explica el responsable de la unidad, el anestesista Martín Arcas, el plasma rico en plaquetas (PRP) es un producto extraído de la sangre del paciente, el cual tiene una alta concentración de plaquetas que, al activarse, liberan una gran cantidad de factores de señalización celular y citokinas.

“A estos factores se le han atribuido efectos antiinflamatorios, regenerativos y analgésicos, y tienen un papel fundamental en el dolor tanto agudo como crónico”, comenta Arcas.

Una de las aplicaciones más conocidas y más estudiadas del PRP es en el tratamiento de la osteoartritis de rodilla, que ha demostrado resultados muy favorables en el control del dolor y del proceso degenerativo articular. Su uso en el manejo de las tendinopatías, más conocido en el mundo deportivo, también se ha extendido y no son escasos los deportistas que se han beneficiado de este tratamiento.

“A día de hoy, su aplicación no sólo se centra en articulaciones y en tendones, sino que, sus beneficios para el dolor de columna ya se han empezado a demostrar y cada día se van publicando más estudios al respecto. Por ello, siendo esta una de las patologías más frecuentes en las unidades del dolor, hemos querido aportar a nuestros pacientes esta novedosa herramienta terapéutica que, además, tiene una ventaja muy clara frente al uso clásico de los corticoides: la ausencia de efectos secundarios sistémicos como pueden ser la hiperglucemia o la hipertensión”, explica el profesional de la unidad de Albacete.

Estos tratamientos conllevan la necesidad de una localización precisa de la estructura concreta en la cual se desea obtener el beneficio antiinflamatorio y, para ello, se realiza siempre con control de imagen (ecografía o rayos X), lo cual aumenta la eficacia y la seguridad del procedimiento.