Unidas Podemos desde el Consell de Eivissa ha presentado en el Pleno de hoy dos ambiciosas propuestas que se enfocan en la sostenibilidad, la primera dedicada a la limitación de los vehículos en la isla, y la segunda para elaborar un estudio sobre la capacidad de acogida.
La moción dedicada a la limitación de vehículos en la isla ha sido la primera en ser rechazada por el equipo de gobierno, la propuesta surge a partir del programa electoral de Unidas Podemos del 2018, y vuelve a reaparecer tras las intenciones del PP ibicenco por realizar una regulación de vehículos, pero atendiendo solo a vehículos de alquiler y autocaravanas.
Antonio Saucedo, Conseller de Unidas Podemos en el Consell d’Eivissa ha comentado que “Eivissa reclama una regulación más comprometida. En 2018 se tachó a nuestra formación de proponer ‘utópicas ideas’ y ahora están abiertos a ellas, pero quieren hacerlo solo de forma parcial, esto solo provocará un aumento de vehículos privados, es una limitación con fugas”.
La formación morada se ha mostrado decepcionada y ha valorado de ‘defectuoso’ el modelo de regulación parcial de vehículos que PP y Ciudadanos, “se necesita una limitación sin excusas, donde se incluya a todos los tipos de vehículos de acuerdo a la capacidad de acogida que tiene la isla”.
El Consell d’Eivissa también ha votado en contra de la segunda propuesta de Unidas Podemos, que planteaba la elaboración de un estudio sobre la capacidad de acogida, para así evaluar los límites sociales y medioambientales de Ibiza.
“En Eivissa y Formentera tenemos una gran carga estacional, si atendemos a la capacidad de acogida de la isla se puede garantizar una transición hacia un modelo económico que se base en turismo responsable y que deje de lado el ‘todo vale’”, ha asegurado la formación morada, “un correcto modelo es la clave para conseguir salir resilientes de esta crisis, es el avance hacia la sostenibilidad y el aprovechamiento de nuestros recursos sin destruirlos”, ha finalizado.
Saucedo ha concluido recordando que “la masificación tiene consecuencias muy graves sobre la calidad de vida de la ciudadanía y uno de los primeros pasos era realizar un estudio sobre la capacidad real de carga socioambiental de nuestra isla como inicio para marcar ese camino tan necesario hacia la sostenibilidad”.