El Principado defiende los intereses de los ganaderos frente al lobo
El consejero de Medio Rural y Cohesión Territorial, Alejandro Calvo, pide evitar debates ideológicos y buscar soluciones para los profesionales del campo
El proyecto del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico sobre la inclusión de todas las poblaciones de lobo ibérico en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre) está generando una elevada polémica en Asturias y sus ganaderos que se sienten perjudicados y ven amenazado el futuro de sus explotaciones.
"Todo el mundo ha de entender que pongamos en el centro a los ganaderos, que son los que sufren el problema", aseguró Alejandro Calvo, minutos antes de reunirse con los principales representantes sindicatos agrarios de la región.
Según Calvo, lo que pretende Asturias es que se recojan garantías jurídicas que permitan seguir con la herramienta que suponen los controles poblacionales de la especie. "El debate que plantea Asturias es poder mantener su plan de gestión", ha señalado. Ha dicho que en sus alegaciones ha facilitado una completa información técnica para justificar su posición, incluidos censos poblacionales de los últimos años.
Por su parte, el secretario general de UCA, José Ramón García, 'Pachón', ha dicho que seguirán "peleando" para que el lobo salga del Lespre. "Y si quieren, que se lleven manadas a las comunidades que lo quieran recuperar", ha comentado. "Ya presentamos las alegaciones pensando en ir a los tribunales, viendo el empecinamiento que existe en el Ministerio", ha dicho.
Nuevas medidas en la PAC
En el transcurso de esa reunión, también se abordaron las novedades que presenta la nueva Política Agraria Común, las nuevas bases recogen las medidas de los últimos cambios del Programa de Desarrollo Rural (PDR) del Principado, que permiten elevar hasta los 70.000 euros la ayuda individual para la incorporación al sector agropecuario de menores de 40 años y flexibiliza los requisitos para acceder a los planes de mejora simplificando su gestión. Los objetivos son favorecer el relevo generacional y el mantenimiento de la actividad en el medio rural.
De este modo, la ayuda a la creación de empresas para jóvenes agricultores, destinada a profesionales de hasta 40 años, aumenta hasta un máximo de 70.000 euros en los casos de quienes inicien su actividad con explotaciones extensivas con limitaciones naturales, en zonas de alta montaña o en espacios naturales protegidos de la Red Natural.
Por otro lado, se flexibilizan las condiciones para acceder a la línea de apoyo a las inversiones en explotaciones agrarias. Las personas mayores de 40 años que se inicien en la actividad agraria podrán optar a estas ayudas, pues a partir de ahora tendrán que acreditar que son titulares de una explotación en el momento de la certificación final.
También se establece que para optar a la ayuda bastará con presentar un plan empresarial, realizado y visado por un técnico competente, que demuestre que las inversiones que se van a realizar están justificadas y que con ellas se mejorará el rendimiento global de la explotación. Los proyectos también podrán contemplar las nuevas realidades de producciones agrícolas y ganaderas de carácter innovador y agro ecológico que se están desarrollando en Asturias.
También se impulsa la perspectiva de género en todas las líneas de ayudas de la convocatoria dando prioridad para favorecer el empleo y el emprendimiento de las mujeres en el medio rural, según ha explicado Calvo a los periodistas antes del encuentro con las organizaciones.
Desde Asaja en Asturias, su presidente, Ramón Artime, pidió al Gobierno asturiano que elimine cargas burocráticas a la hora de que el sector agrícola pueda acceder a ayudas. "Necesitamos una Administración mucho más ágil", ha dicho. Explicó que las ayudas tienen un proceso muy largo por delante, que en muchas ocasiones no pueden asumir los profesionales. Artime ha pedido "menos vender cantidades" y "más agilidad" al Gobierno asturiano.