El Pleno del Ayuntamiento se reorganiza

El Pleno del Ayuntamiento de Oviedo ha aprobado este miércoles las modificaciones organizativas de la Corporación y el régimen del concejal no adscrito Hugo Huerta, toda vez que el ex edil de Vox ha abandonado el partido. El PP y Ciudadanos han votado a favor (14), PSOE, Somos y Vox han votado en contra (12) y el edil no adscrito se ha abstenido. El nuevo régimen implica que Huerta cuente con voz y voto --que contará un 0,4-- en las comisiones plenarias, algo que altera la proporcionalidad en las mismas. El Grupo Municipal de Vox, por su parte, desaparece al perder un concejal y su portavoz, Cristina Coto, será la única integrante del Grupo Municipal Mixto.

El secretario del pleno, Jesús Fernández de la Puente, ha explicado que, de acuerdo con la doctrina del Tribunal Constitucional (TC) los concejales no adscritos "tienen derecho a participar con voz y voto en todas las comisiones", algo que "altera necesariamente la proporcionalidad".

El informe en el que se sustenta la modificación aprobada hoy ha agregado el secretario, refleja también que el Grupo Municipal de Vox pasa a ser Mixto, al no tener ya dos miembros, de acuerdo con el reglamento del Pleno, y tiene derecho a estar en todas las comisiones. Informa el secretario de que "un Grupo de un miembro tiene el mismo derecho a voto que el resto de los grupos, aunque eso implique una sobrerrepresentación y altere las proporciones". De este modo, el voto de Cristina Coto computará como uno, ya que la reducción proporcional se aplica solo a concejales no adscritos.

Ante esta situación, el Grupo Municipal de Somos ha presentado una enmienda in voce a la propuesta de Alcaldía, que ha sido rechazada, pidiendo que el voto en comisiones tanto de Hugo Huerta como de Cristina Coto cuente un 0,5 cada uno. Pide lo mismo para el Consejo Rector de la Fundación Municipal de Cultura, a la que Huerta se suma como vocal y con un voto que cuenta un 0,4.

LA PROPUESTA "ES INJUSTA" SEGÚN SOMOS Y PSOE

Para la portavoz de Somos, Ana Taboada, el acuerdo aprobado este miércoles es "injusto" porque supone una ponderación de votos superior para los dos concejales que se separan que para el resto de los grupos de la oposición. La propuesta sacada adelante, ha agregado, supone una "sobrerrepresentación de la ultraderecha que no se colige con el resultado electoral de 2019".

En la misma línea, el portavoz del Grupo Municipal Socialista, Wenceslao López, ha defendido que la proporcionalidad acordada en 2019 "no debe alterarse" tres años después y a unos meses de las elecciones. Entiende López que el escenario "debe mantener las mismas reglas de juego" y no modificarse porque "un concejal haya decidido irse de su partido".

Por su parte, la concejala Cristina Coto ha defendido que "Vox seguirá existiendo, crecerá y seguirá exactamente igual que existía hasta ahora", aunque ahora pase a llamarse Grupo Mixto. La edil ha afeado que su excompañero abandone el partido pero se mantenga en el cargo de concejal, subrayando que la manera de acceder a ese puesto es "única y exclusivamente formando parte de una lista de un partido que deposita en ti la confianza, partiendo de la base de que comparten ideología y funcionamiento".

"Una vez que una persona 'x', por el motivo que sea, rompe con esa formación que le abrió la puerta, lo suyo sería dar la vuelta y salir por la misma puerta", ha remarcado. Sin embargo, hoy se ha debatido un acuerdo por el que el concejal no adscrito pasa a participar en todas las comisiones y en el consejo rector de la FMC, lo que "supera el límite de la participación política".

Respecto a la enmienda de Somos, Cristina Coto ha señalado que no va a entrar en "las matemáticas miserables de la ultraizquierda" sobre si los votos de los dos ediles suman 1 o 1,4. "Es irrelevante", ha asegurado, remarcando que Vox trabajará "de manera idéntica" a como trabajaba antes, llevando Coto "el peso y el esfuerzo" del Grupo.

El ahora concejal no adscrito, por su parte, no ha utilizado sus turnos de intervención en el pleno más que para informar de su abstención en el acuerdo votado, al ser el principal afectado por el mismo.