El arresto tuvo lugar, según ha informado este lunes la Policía Nacional, el pasado 1 de febrero. Los policías estaban controlando viajeros y equipajes en la estación de Oviedo del tren de larga distancia Alvia.
Allí identificaron a un pasajero de unos 50 años de edad y fue entonces cuando comprobaron que portaba en su equipaje varias armas, entre las que se encontraba una carabina del calibre 22, con silenciador, modificada y desmontada en dos partes, con su correspondiente munición.
Además, le fueron intervenidos unos 'nunchacos', un hacha de grandes dimensiones y varias navajas de gran tamaño. Los agentes de policía, al comprobar que el viajero no poseía ninguna licencia de armas, procedieron inmediatamente a la detención de esa persona por un delito de tenencia ilícita de armas y fue puesto posteriormente a disposición judicial.