Meryl Streep resalta el valor de la "empatía" en un discurso con menciones a Picasso, Lorca y Penélope Cruz
El doctor Luis Pizarro llamó a la esperanza sobre las enfermedades desatendidas y el campeón Kipchoge animó a todos a correr para ser uno
La empatía de la Princesa de las Artes
La actriz estadounidense premio Princesa de las Artes Meryl Streep ha invitado este viernes en Oviedo a tener en cuenta que “lo importante es escuchar”. Emocionada, al punto de la lágrima, sonriente como los cuatro días que lleva en Asturias, la intérprete ha afirmado en el ceremonia de entrega de los premios Princesa que “persevero a pesar de los críticos porque creo que el trabajo de un actor es invadir, encarnar vidas que no son como la suya”. La tres veces ganadores de los Óscar ha reiterado en varias ocasiones el valor de la empatía.
Los guiños de la estrella de Hollywood a España ha sido varios. “Un gran artista español, Pablo Picasso, dijo que “imitar a los demás es necesario. Imitarse a un mismo es patético””. Prosiguió aludiendo a la actriz española más internacional estos tiempos, Penélope Cruz cuando dijo que “¡No puedes vivir tu vida mirándote a ti mismo desde el punto de vista de otra persona!”. Al final, concluía Streep, “lo más importante de nuestro trabajo es que la vida sea sentida por el público que está sentado un pequeño teatro de Málaga o por streaming en cualquier parte del mundo”. Además, recordó que en la universidad, diseñó el vestuario para ‘La casa de Bernarda Alba’ de García Lorca, una obra “atemporal” porque “actuar en un obra como esta es prestarles a los muertos una voz que los vivos pueden oír”.
La protagonista de ‘Los puentes de Madison’, ‘La decisión de Sophie’, ‘Las horas’ o ‘Memorias de África’ dio las “gracias de corazón por este gran honor” ante un auditorio que, como el público de estos cuatro días, han apreciado a la Princesa de las Artes 2023.
Ánimo para correr
El director ejecutivo de la Iniciativa Internacional de Enfermedades Desatendidas Luis Pizarro ha enviado en Oviedo este viernes un mensaje de esperanza pero también de aviso sobre este tipo de patologías. La Fundación Princesa reconoció a DNDi a esta acción como premio Princesa de Cooperación Internacional 2023. El doctor Pizarro ha citado los casos de la sudanesa Amasi con micetoma, el indio Bimal con leishmaniasis y VIH o Brinol, un niño de Congo con enfermedad del sueño. En este último caso, el trabajo de DNDi ha servido para evitar “inyecciones de un medicamento a base de arsénico que mataban a uno de cada 20 pacientes”. La Iniciativa desarrolló una “pastilla simple, segura y Brinol está sano y curado”.
El director de DNDi ha recordado que “millones de enfermos y enfermas, desatendidos, olvidado, invisibles, hasta mil seiscientos millones de personas sufren alguna de ellas cada año”. En esta línea de aviso, Pizarro señalaba que el cambio climático y la migración suponen una mayor movilidad de ciertas enfermedades hasta el punto de que “en España existen hoy pacientes con la enfermedad de Chagas o casos cada vez más importantes de dengue. La de Chagas será pronto una de las principales causas de trasplante cardíaco en España”.
Pizarro incidió en que “si nuestros pacientes se ven privados de los avances de la investigación médica es porque nacieron en el lugar equivocado. Son ignorados por la investigación farmacéutica tradicional porque son demasiado pobres para constituir un mercado lucrativo y son desatendidos por los decidores políticos porque no tienen voz que se oiga”.
Pero más allá de este mensaje de atención, el representante del premio de Cooperación también ha querido “traer esperanza y no sólo una lección de moralidad”. Por eso ha indicado que trabajando con socios de todo el mundo y en los países afectados, DNDi ha desarrollado “12 nuevos tratamientos para los pacientes olvidados. No es una exageración decirlo: ¡todos juntos hemos salvado millones de vidas!”.
La ciencia puede con la enfermedad
El premio Princesa de Asturias de los Deportes Eliud Kipchoge ha afirmado este viernes en Oviedo que “un mundo que corre es un mundo feliz. Un mundo que corre es un mundo unido”. El campeón olímpico y mundial y propietario hasta hace poco del récord del mundo de maratón reflexionó sobre por qué corre y qué significa el éxito.
“Correr no es sólo un movimiento físico. Corres une a personas de todos los ámbitos de la vida, permitiendo que distintas culturas y trayectorias se unan para correr”. En este sentido, señala que se refiere a él mismo pero también “a los cuarenta mil corredores que corren la carrera conmigo y, sobre todo, a las miles de personas en las calles animándolos”.
El deportista africano se reconoce como “un hombre muy afortunado por tener una carrera profesional que me ha aportado tantos momentos señalados”. Y así ha lanzado un mensaje sobre lo significa el triunfo: “creo que no se puede apresurar el éxito; requiere una actitud firme tanto en los deportes como en la vida. Para llegar a la cima se necesita mucha disciplina, innumerables horas de duro trabajo”. El premio de los Deportes concluye que “uno no puede tener éxito solo. Nos necesitamos unos a otros, tanto en la vida como en los deportes”.
Como ejemplo de la importancia del trabajo en equipo, Kipchoge explicó que “mis compañeros y yo establecimos la tradición de plantar un árbol para celebrar nuestros éxitos por el camino ya que, una vez alcanzada la meta, el momento de gloria es fugaz. Pero la alegría que produce el crecimiento de un árbol dura muchas vidas”:
Kipchoge, uno de los pocos premios Princesa de los Deportes que interviene en la ceremonia en las 42 ediciones de los galardones, animó a participar en su Fundación dedicada al medio ambiente y la educación.