"Asturias es la comunidad con más municipios reconocidos por Unicef como ciudades amigas de la infancia"
La consejera de Derechos Sociales y Bienestar, Melania Álvarez, participó este fin de semana en los actos institucionales con motivo del Día Universal de la Infancia, celebrados en Arriondas.
Asturias es la comunidad con más municipios reconocidos por Unicef como ciudades amigas de la infancia, con un total de 44, y la que ha logrado más distintivos de estas características en relación con el número de habitantes. El sello reconoce el compromiso de las administraciones locales con el cumplimiento de los derechos de los menores, de acuerdo con la Convención sobre los Derechos del Niño.
La consejera de Derechos Sociales y Bienestar, Melania Álvarez, ha destacado estas cifras en el acto conmemorativo del Día Universal por los Derechos de la Infancia celebrado este sábado en Arriondas, donde ha recordado que más 1.500 menores asturianos forman parte de los grupos de participación infantil y juvenil y que dos de cada tres son niñas.
La conmemoración ha incluido la presentación del programa Infancia por un concejo saludable, la explicación del proyecto La liga por la Tierra, cuidemos el medio ambiente; a cargo del grupo de participación infantil y juvenil del concejo de Parres, y la exposición de trabajos realizados por el alumnado del Colegio Público Río Sella.
Álvarez ha señalado que su departamento trabaja en una nueva Ley de Infancia y Adolescencia que garantiza y promociona los derechos de los menores y pone el acento en su dignidad como personas, así como en su condición de ciudadanos. “El siguiente trámite previsto es la redacción del primer texto de la norma para su posterior información pública. Estamos convencidos de que esta legislación actualizará la atención a la infancia, ajustándose a sus necesidades y blindando sus derechos”, ha asegurado.
La consejera también ha destacado la participación de la población infantil en la elaboración de la ley. En este sentido, ha recordado que desde su departamento se puso en marcha una campaña, que todavía sigue vigente, en la que a través de los grupos de participación infantil y juvenil, los ayuntamientos y los centros de menores se anima a los pequeños a que planteen sus aportaciones a la norma para recogerlas en un documento.