El Gobierno de Aragón ha confirmado que el análisis genéticode la muestra de excrementos recogida en las proximidades de la localidad oscense de Robres, en uno de los ataques de las últimas semanas, procede de un Canis lupus iItalicus, lobo italiano. Los análisis se han realizado en la Universidad de Barcelona y se han dado a conocer este jueves al Servicio Provincial de Huesca. El Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente incluirá a la localidad de Robres en la próxima convocatoria de ayudas para hacer frente a los sobrecostes derivados de la presencia del lobo y el oso para la ganadería extensiva.
El último ataque se producía en la noche del 13 al 14 de septiembre. Pero no es el único, en sólo 12 días se han producido un total de tres ataques con unos 36 animales afectados entre reses heridas y muertas. También los pasados meses de mayo y agosto se registraron sendos ataques en una localidad cercana, Torralba de Aragón, que causaron unas diez reses muertas y que fueron certificadas como ataque de lobo.
Asaja Aragón ha denunciado este nuevo ataque y recuerda que la presencia de alimañas es "incompatible" con la ganadería extensiva. Aseguran que la angustia, incertidumbre e impotencia se está apoderando de los ganaderos de estas zona. A lo que hay que sumar las pérdidas económicas, la reducción en la biodiversidad por la pérdida de cabaña ganadera y el aumento en el estrés de los animales que sufren estos ataques.