El grupo Folklórico Alto Aragón celebra del 28 al 30 de julio las jornadas ‘Al son del chiflo’ como preámbulo al Festival

El Grupo Folklórico Alto Aragón, en colaboración con el Festival Folklórico de los Pirineos, organiza del 28 al 30 de julio las jornadas 'Al son del chiflo', que servirán de antesala del certamen más antiguo de España, que tendrá lugar del 2 al 6 de agosto. Estas jornadas se enmarcan en el extenso programa de actividades que se está desarrollando este año para conmemorar los 400 años de los bailadores de Santa Orosia. Estas jornadas incluyen una feria de lutieres, un festival, música en la calle, talleres, conciertos y una mesa redonda.

Para los días 28, 29 y 30 de julio “hemos organizado en colaboración con el Festival Folklórico de los Pirineos las Jornadas ‘Al son del chiflo’, a modo de un pre-festival”, explica Fernando Estallo, presidente del grupo Folklórico Alto Aragón.

En estas jornadas “pretendemos poner en valor las músicas tradicionales que se interpretan con la flauta de tres agujeros. La razón es bien sencilla: su estrecha relación con el chiflo de nuestra zona, instrumento, que junto con el salterio, son una clara seña de identidad musical de nuestra tierra y que acompañan a los dances que se ejecutan en honor de Santa Orosia”.

Van a ser tres días de música en nuestras calles y plazas, y de encuentro entre los participantes, que proceden de diversos puntos del territorio nacional y también de Francia. Jornadas “para potenciar y difundir la música tradicional”. Algunos de los participantes estarán acompañados por bailadores con el fin de poner una nota de color y vistosidad a sus interpretaciones. Estallo aclara que “no van a ser unas jornadas con grupos folklóricos al uso bailando en las calles, sino unas jornadas para disfrutar, descubrir y apreciar la música tradicional interpretada con flautas de tres agujeros”.

Manuel Tomeo, del grupo Folklórico Alto Aragón ha hablado de la Contradanza de Cetina, declarada Bien de Interés Cultural e Inmaterial por el Gobierno de Aragón. “Todos los años el día de San Juan Lorenzo, la noche del 19 de mayo, los cetineros realizan la contradanza, una serie de mudanzas dedicadas a este santo”. El personaje llamado ‘el diablo’ es el que dirige el baile, que se realiza bajo la luz de la luna y las antorchar que portan los propios contradanceros.

“Es una antesala de lujo en la que contaremos con tradición, folklore, dances y baile”, asegura el alcalde de Jaca Carlos Serrano. En este sentido se está innovando, ya que estas jornadas son una de las novedades de la 52 edición del Festival Folklórico de los Pirineos, “y qué mejor que dedicarlo a la verdadera tradición, que se muestra con los 400 años de los bailadores de Jaca”, añade. El primer edil señala que “es un logro” que después de 400 años “mantengamos viva esa tradición y lo podamos poner en valor con nuestro querido festival, que lleva vivo desde 1963”.