Las celebraciones serán multitudinarias, pero se concentrarán durante los fines de semana, ya que el día grande, el 12 de octubre, es miércoles y no hay puente para alargar la estancia en la ciudad. La planificación en cuanto al refuerzo de servicios y agentes será similar a la de antes de la pandemia.
Así, en los conciertos de la plaza del Pilar el aforo se limita a 42.000 personas y volverá a utilizarse el sistema de conteo en los 19 accesos de este espacio. El paseo de la Independencia se cortará en algunos tramos del día. El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, prevé una participación masiva en las fiestas, aunque todo dependerá del tiempo.
Durante las celebraciones, estarán activos cinco puntos violeta en distintos espacios de la ciudad para denunciar cualquier tipo de agresión o abuso. Otros grandes escenarios de la ciudad son el Espacio Zity, con un aforo de 25.000 personas, y el recinto ferial, con 20.000 personas. La delegada del Gobierno en Aragón, Rosa Serrano, ha destacado la coordinación de todos los efectivos de seguridad.