El 14F se salda con cortes y descargas de tomates en el Puerto de Motril e Iznalloz
Guarromán y el Puerto de Motril, donde se ha bloqueado la llegada de un ferry procedente de Marruecos, han sido puntos clave para la jornada de este "súper miércoles".
La crisis del campo sigue fuerte este miércoles con la protesta secundada por las asociaciones agrarias y ganaderas. Granada se une a esta cita a nivel nacional. Los agricultores, procedentes de distintos puntos de la provincia de Granada y también de Almería, se han desplazado hasta los puntos de convocatoria con varios autobuses.
VOLCADA LA CARGA DE UN CAMIÓN
En la A-44 a la altura de Iznalloz, esta mañana los manifestantes han llegado incluso a volcar la carga de un camión procedente de Marruecos que transportaba tomates cherry. Montse es una trabajadora que para llegar a Venta de la Nava ha estado retenida durante unos 20 minutos. Escucha aquí su testimonio.
Estas concentraciones no han sido comunicadas a la Subdelegación del Gobierno. A diferencia de las que han tenido lugar en el Puerto de Motril, que sí han sido comunicadas a la Subdelegación. Aquí se han llegado a concentrar cientos de agricultores. En Onda Cero hemos hablado con Miguel Monferrer (COAG), con Nicolás Chicas (UPA) y Manuel del Pino (Asaja).
EL CULTIVO DE INVERNADEROS
Miguel Ángel Serrano es uno de los agricultores presentes en esta protesta en Motril. Cultiva tomates en invernadero.
Desde las asociaciones agrarias aseguran que el calendario de movilizaciones oficiales arranca con el corte de la A-44 a la altura de Guarromán (Jaén) y en el puerto de Motril. Escucha aquí a Manuel del Pino es secretario provincial de Asaja.
José Ángel Osuna es agricultor de la Vega granadina. Vive en Atarfe. Trabaja el maíz, cultivos herbáceos y el olivar. Por la falta de agua, llegó a perder toda su cosecha del espárrago. Los costes de producción se dispararon. Según sus cálculos ha llegado a perder entre treinta y cuarenta mil euros en espárragos. De momento, el maíz tampoco ha podido sembrarlo por la fuerte sequía.
José Ángel lleva una empresa familiar formada por cerca de diez personas. Según nos relata, los costes de producción se han disparado en época de sequía más de un doscientos por ciento.
“En 2023 he perdido más de 120 mil euros”. La esperanza ahora es salvar el olivo en primavera.
Nos atiende tras visitar la almazara. Nos cuenta que ahora la garrafa de cinco litros de aceite se vende a 51 euros. Teniendo en cuenta el coste de energía -el cual, ha subido hasta un 200 por ciento- y el coste de trabajo, no consiguen sacar beneficio pues el precio de venta del aceite es el mismo que el de producción.