Puigdemont dice a su entorno que Sánchez "meará sangre" si quiere alcanzar un acuerdo

El entusiasmo inicial que sintió el PSOE después de las elecciones del 23-J parece estar apagándose, a medida que se complican las negociaciones con Junts: Pedro Sánchez "meará sangre" si quiere alcanzar un pacto con los de Puigdemont, ha afirmado el líder de los posconvergentes hablando en su entorno privado acerca de las negociaciones con los socialistas, tal y como recoge el medio El Independiente. Según explica el medio, la ley de amnistía y la celebración de un referéndum de autodeterminación serían puntos imprescindibles e innegociables en cualquier acuerdo firmado por Junts de cara a una futura investidura.

Los 7 diputados del partido de Borrás y Puigdemont, que ha empeorado sus resultados con respecto a 2019, tienen en sus manos una serie de votos clave a la hora de reeditar el gobierno de coalición de Sánchez. Después de la pérdida de un escaño en Madrid tras el recuento del voto CERA, el PSOE necesitaría al menos un "sí" de Junts para llevar a su candidato hasta La Moncloa.

Este apoyo explícito de Junts no parece tan fácil de conseguir - a pesar del optimismo que parecen querer transmitir desde las filas socialistas-, puesto que el PSOE recurrirá hasta el Tribunal Supremo la última decisión adoptada por la Junta Electoral, que rechaza la revisión de los votos nulos emitidos en la circunscripción de Madrid.

A falta de poco más de 1.500 votos para arrebatarle un escaño al PP, desde el PSOE afirman que buscan ser los más "garantistas" posibles aunque, por el momento, parece necesario un "sí" de Junts para posibilitar una investidura de Pedro Sánchez.

Puigdemont "enrocado"

Sin embargo, informa el Confidencial, Puigdemont estaría "enrocado" y dispuesto a afrontar una repetición electoral, si el referéndum y la amnistía no se ponen sobre la mesa. Los aliados independentistas de Junts, Esquerra Republicana, sí formaron parte del bloque de investidura en 2020, y parecen más abiertos a negociar con los socialistas.

Por el momento, los republicanos apoyan una Presidencia socialista de la Mesa del Congreso, y en las negociaciones al respecto han pedido conformar un grupo parlamentario propio, tal y como expresó ayer la diputada Teresa Jordá después de recoger su credencial en el Congreso.

El partido presidido por Oriol Junqueras apela a Junts para evitar un bloqueo, y para trabajar juntos en la obtención de concesiones para el nacionalismo. Jordá declaró ayer que los independentistas tienen ahora una "ocasión de oro" que no deberían "echar a perder".

El papel de ERC y Sumar

La representante de ERC ha querido reivindicar el papel de su partido, afirmando que "nada es gratis" y que no ofrecerán sus votos a cambio de nada. "Sabemos quién es el PSOE, quién es el PP, son los del 155, los conocemos perfectamente" ha añadido Jordá, que afirma que en su formación prefieren un "Gobierno progresista", y que prefieren "siempre hablar con el PSOE antes que con el PP".

La otra muleta sobre la que se sustentaría Sánchez en caso de revalidar su cargo, Sumar, estaría también manteniendo conversaciones con las formaciones soberanistas catalanas; Jaume Asens, líder de En Común Podem, está liderando las negociaciones entre los de Díaz y los independentistas, que, como declaró ayer el portavoz de campaña Ernest Urtasun en una entrevista, estarían avanzando "de forma positiva".

Jordi Turull, secretario general de Junts, reaccionó en una de sus redes sociales a estas declaraciones acerca de unas posibles conversaciones fructíferas: "Primera noticia, al menos en lo que respecta a JxCat", escribió Turull en una de sus redes sociales.