En ocho semanas los catalanes vuelven a las urnas. Esta mañana el president Pere Aragonès firmará el decreto de disolución del Parlament catalán y la convocatoria de elecciones autonómicas para el próximo domingo 12 de mayo.
Este lunes La Razón publica la primera encuesta sobre las elecciones catalanas. De acuerdo al sondeo de NC Report, los socialistas del PSC ganarían los comicios con entre 36-37 escaños, lo que supondría una subida de 300.000 votos y tres o cuatro diputados más en el Parlament.
Así, Salvador Illa, volvería a ser el candidato más votado, pero necesitaría conseguir una mayoría holgada que le permitiera gobernar en solitario, al contrario de lo que ocurrió en 2021, que empató en escaños con Esquerra Republicana.
El objetivo de Pedro Sánchez es que la victoria de su candidato, el exministro Illa, refuerce el argumentario del gobierno que vincula la recién aprobada ley de amnistía con una nueva etapa de reconciliación y de superación de la confrontación soberanista en Cataluña.
En segundo lugar ya no estaría Esquerra, sino Junts per Cataluña con entre 32-33 escaños. Con el 21,3% de los votos, el partido de Carles Puigdemont se situaría como la primera fuerza independentista en Cataluña, a la espera de que Puigdemont confirme si él será finalmente el candidato, pues podría volver a España cuando entre en vigor la ley de amnistía.
Los de Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) lograrían entre 30-31 diputados, dos menos que los actuales. Dentro del independentismo se libra la batalla por ver quién ganaría y si podrían mantener el Govern de la Generalitat con el apoyo de la CUP.
Por su parte, el Partido Popular crecería hasta diez escaños, logrando entre los 12-13 diputados, mientras que Vox perdería dos escaños de los que tiene actualmente, con entre 9-10 escaños.
Con estos datos, el escenario plantea grandes complejidades a la hora de sumar mayorías. De haber acuerdo en el bloque independentistas sí alcanzarían la mayoría en la cámara, con los votos de la CUP, que conseguirían 7 diputados.
Otra opción posible, aunque improbable, sería un tripartito con Illa al frente de la Generalitat, con ERC en el gobierno y metiendo en esta misma ecuación a quienes acusan de dinamitar el gobierno, los comunes. En Comú Podem perderían dos diputados en el Parlament, logrando 6 escaños según los datos que maneja NC Report.