Un punto, Bale, Ronaldo y muchas dudas antes de medirse al Barcelona
Leve mejoría en el juego del Real Madrid en un partido aburrido ante el Levante que dejó dudas en el equipo de Ancelotti. Bale se reencontró con el gol, Modric mejoró las transiciones del conjunto blanco y lo mejor de todo, el Barcelona sigue un punto por encima. Cristiano sigue en su mundo prepotente y el medio centro del Real Madrid no parece encontrar su mejor lucidez.
El Real Madrid está donde quería, a un punto del Barcelona ante de medirse al conjunto azulgrana en el Camp Nou. Sin embargo el equipo de Ancelotti no parece haber adquirido toda la confianza posible en su juego para el asalto al liderato el próximo domingo. Partido muy aburrido ante el Levante donde la leve mejoría de juego la puso Modric.
Se notó la vuelta del croata en el centro del campo del Real Madrid. Sin embargo falta lucidez en esa faceta del juego donde no se aprecian esas transiciones rápidas con las que tanto sueña Carlo Ancelotti. En parte, puede ser por la poca participación de Lucas Silva en el juego del Real Madrid. El brasileño apenas colaboró, o sus compañeros no quisieron colaborar con él, en el comienzo de cada jugada.
Si es cierto que el Levante no fue la mejor vara de medir teniendo en cuenta el escollo que se le presenta al conjunto blanco el próximo domingo. Quizá la entrada de Tony Kross, acompañado de Modric e Isco mejore el juego del equipo y haya más conexión con la BBC. Una conexión que anoche volvió a ser nula exceptuando las penetraciones de Luka Modric.
Y aquí vienen algunas de las dudas que surgieron en el partido a pesar del dominio de la primera parte. La presencia de Lucas Silva condicionó a Isco a crear las jugadas desde atrás, sin conseguir conectar con ninguno jugador de ataque. Hay aparecía Benzema para ejercer de media punta y dejar libre su posición de delantero centro. Una demarcación que no aprovecharon ni Bale ni Cristiano Ronaldo.
No ayuda tampoco la labor del entrenador italiano para mejorar a su equipo. Sigue empeñado en el 4-3-3 aunque por momentos utiliza el 4-4-2 en la faceta defensiva. A esto se suma las pocas rotaciones y los cambios tardíos que sirven para dar descanso a los habituales pero que no mejoran el equipo.
Por otro lado, también sigue empeñado el entrenador del Real Madrid, como es lógico, en jugar con Cristiano Ronaldo y Bale. Se desconocen los motivos por los que algunos de estos dos futbolistas pasen por el banquillo, sobre todo el galés. Aunque anoche marcó los dos goles de su equipo y fue el protagonista en la primera parte del encuentro.
Sin embargo, Ronaldo y Bale siguen a lo suyo, sin mirar por el equipo. El portugués, media chilena que acaba en el primer gol de su equipo y sólo se le ocurre enfadarse consigo mismo, nada de celebraciones. El galés que marca el primero de la noche y nada de celebraciones con el equipo...tapadita de orejas y patada al banderín como muestra de rabia a los pitos de la afición en anteriores encuentros. Feos gestos que no aportan a la unidad equipo-afición que tanto desea el presidente del club.
Pero sí, el Real Madrid sigue a un punto del Barcelona, también es cierto que están donde querían; ganar algún partido antes de llegar al Camp Nou para tener toda la confianza de llevarse el Clásico. Sin embargo, de las dos recargas de moral que les quedaba, fastidiaron una ante el Schalke y la otra la consumieron a la mitad ante el Levante.
Quizá anoche hubiese una leve mejoría del juego del Real Madrid, quizá se haya rebajado la tensión en el club blanco, tal vez ya no se hable de crisis en el Santiago Bernabéu, pero ¿será suficiente para llevarse el Clásico?