Rosberg consigue la victoria en Baréin por delante de Raikkonen y Sainz abadona
El GP de Baréin 2016 es propiedad de Rosberg. Nico ha vuelto a lograr un triunfo tras el cosechado en Australia en una exhibición de solidez y de seguridad en su pilotaje para conseguir la victoria por delante de Raikkonen y de un Hamilton que volvió a fallar en la salida. Vettel rompió motor en la vuelta de formación, y Button y Sainz abandonaron en carrera.
Madurez. Seguridad. Sobriedad. Todo lo que le faltó durante dos temporadas, todo lo que le hizo caer ante Lewis Hamilton, es lo que está exhibiendo Nico Rosberg en este comienzo de Mundial 2016. Es lo que está mostrando Nico Rosberg en las dos primeras carreras de F1 de este curso. Ganó en Australia, y ha vuelto a ganar en Baréin. El alemán, confiado y solvente, ha sido superior sobre la pista de Sakhir y se ha impuesto sin problema alguno a Raikkonen y a Hamilton.
Y todo nada más arrancar, porque otra vez el arranque fue el principal hándicap de su máximo rival. Sí, salía primero. Y sí, Vettel había roto motor en la vuelta de formación. Pero ni con esas Lewis es capaz de tener una salida limpia. No fue tanto responsabilidad suya, pues Bottas se lo llevó puesto y le dejó con el Mercedes 'a medias', pero otra vez se vio inmerso en una batalla de manera innecesaria que le dejó en bandeja la victoria a otro piloto.
A Rosberg, mejor dicho. Porque Nico se está consagrando. Porque Nico, por fin, ha madurado. Ha crecido. Ha dejado atrás el nerviosismo y el mal de altura que tantas veces le acompañaron en los momentos más cruciales de estos últimos tiempos. Sólido, no se dejó amedrentar por nada ni por nadie. No tomó nunca una mala decisión. Y siempre sabía qué hacer, cómo hacerlo, y cuándo hacerlo. Raikkonen, su máximo perseguidor, fue sólo una sombra lejana que jamás llegaría a la altura de la flecha plateada.
Festival de Grosjean
Una que iba en vuelo. Doblando a todos, incluidos los dos Williams. Se libró Jenson Button de ser doblado por Rosberg, aunque ni mucho menos fue por el gran rendimiento del McLaren-Honda. Otra vez volvieron a revivir viejos tiempos y en la vuelta 8 su coche dijo adiós. Se detuvo, salió del monoplaza y dejó a Alonso, hoy uno más en el box, con cara de 'no puede ser posible'. La noticia positiva fue Vandoorne, que en su primera carrera logró sumar un punto mostrándose muy competitivo.
Ahora, que para competitivo el Haas. Se nota el corazón Ferrari que tiene. Gutiérrez, de nuevo K.O., vio cómodamente cómo Romain Grosjean se divertía. Cómo el galo protagonizaba un auténtico festival de adelantamientos en los que dejaba claro que este coche está bien hecho. Que no hay que pensar en ellos como 'los que debutan', y que va a ser posiblemente habitual verlos en los puntos. A ver si Carlos Sainz se rehace en China de lo pasado en Sakhir...
Porque Carlos no pudo cruzar la bandera a cuadros. Carrera problemática para él, pues un pinchazo tras un toque con Pérez ya le dejó maltrecho. Luego un mal pit stop le terminó por rematar... hasta que tuvo que abandonar claro. No empieza con la suerte de su lado, pues no sólo es un cero en el casillero sino también un abandono.
China, carrera de cuentas pendientes
A ver si lo que le faltó en Baréin lo tiene en Shanghai, pues si el motor Ferrari da tanto poder al Haas no tiene por qué no dárselo al Toro Rosso. Carrera importante la de China, pues muchas cuentas pendientes va a haber allí. Hamilton, con la necesidad de remontar el vuelo. Vettel, que debe demostrar la solvencia de su unidad de potencia. Y claro está Fernando Alonso, que salvo contratiempo regresará a bordo de un McLaren-Honda que sigue dando una de cal y otra de arena.