El Málaga tuvo en la palma de la mano su sexta victoria consecutiva, pero el Granada pegó la estocada cuando quedaba muy poco para el final. Kravets, de cabeza, apagó la sensacional dinámica de los boquerones al calor de su público. Tras este punto, los de Juande Ramos se quedan octavos y los rojiblancos continúan en la penúltima posición.
Los locales se adelantaron con un cabezazo de Camacho a los 25 minutos. El centrocampista aprovechó un excelente centro de Rosales para batir a Ochoa con facilidad. El portero mexicano, cedido por los malagueños, pudo jugar al no tener la famosa cláusula del miedo. El 1-0 permitió a los blanquiazules crecer mucho más.
Mikel tuvo muy cerca el segundo con un cabezazo a pocos metros de la línea de gol y Ontiveros demostró que su verticalidad en uno de los mejores argumentos del Málaga. Sandro, que volvió tras lesión, también lo intentó todo sin suerte, sobre todo en el tramo final de la segunda mitad.
Fue entonces cuando cambió completamente el partido. Kravets igualó la contienda y el Málaga se volcó sobre la meta rival para no dejar escapar dos puntos. Ochoa realizó dos grandes paradas y la que no detuvo, un cabezazo de Llorente, fue anulado por fuera de juego. Un acción legal en la que salió perjudicado el cuadro local.