Madrid | 23.03.2021 14:01
Su físico engaña, siempre lo ha hecho. Pedri es un futbolista no muy alto, delgado, aparentemente frágil. Pero nada más lejos de la realidad. Despuntó en su Tegueste natal, al norte de Tenerife, y pronto se le vieron maneras de buen jugador. El Juventud Laguna fue su siguiente destino en edad aún infantil.
Probó con el Real Madrid, pero le dejaron escapar y se enroló en la U.D. Las Palmas. En el club amarillo su carrera fue meteórica: del juvenil al primer equipo… y de Segunda al Barcelona. Todo en apenas un par de años y en un traspaso que visto ahora con perspectiva es casi irrisorio: 5 millones de euros.
En el Camp Nou, su talento y su entrega han enamorado a Leo Messi, quien ya le ve como su mejor socio. Koeman le ha dado galones. Y el barcelonismo le idolatra como el nuevo Iniesta. El siguiente paso es la selección absoluta. Luis Enrique le ha llamado a filas y puede hacerle debutar estas próximas semanas en los primeros partidos hacia el Mundial de 2022 (ante Grecia, Georgia y Kosovo).
Tras vivir sus primeras horas con la selección, Pedri ha comparecido hoy en rueda de prensa, donde ha asegurado que “me han tratado muy bien. Quiero aprender de los que llevan más tiempo y coger pronto los automatismos del equipo”.
Pedri ha añadido que “no tengo presión por las comparaciones con Iniesta. Sé que tengo que ser yo mismo. Tanto él como Messi me dieron la enhorabuena por la convocatoria. Sé que puede tener la conexión que tengo con Messi con muchos jugadores de aquí porque tienen mucha calidad”.
Y respecto a la apuesta de Koeman por su juego, Pedri no ha dudado al aseverar que “tiene mucha culpa de que yo esté aquí. Ha confiado en mí desde el principio, así que tengo que agradecerle esa confianza. Que siga o no al frente del club en un futuro es algo que no es decisión mía”.