IGUALA A EUSEBIO CON 46 GOLES EN LA CHAMPIONS

Cristiano Ronaldo y diez más

El delantero portugués ha vuelto a ser el encargado de tirar del carro del Real Madrid y mantiene muy vivo el sueño de la Décima gracias a un gol al que fue su equipo en Inglaterra. Un salto imponente, como su cabezazo para llevar el balón a la red de De Gea.

ondacero.es

Madrid | 13.02.2013 23:02

Real Madrid-Manchester United | EFE

Cristiano Ronaldo siempre está para mantener al Madrid en pie y en la Liga de Campeones, ante el Manchester United, con más argumentos y más insistencia, hasta convertir el asunto en una cuestión casi personal. Ronaldo se encontró con su pasado cara a cara. A viejos conocidos, rostros familiares que forman parte de su madurez, de la explosión y continuación, que le mostraron el trayecto hacia el Olimpo en el que está aposentado.

La Liga de Campeones es una asignatura pendiente del Real Madrid y también del luso, que igualó al mítico Eusebio como el máximo goleador de Portugal en la historia de la principal competición continental de clubes. Cristiano Ronaldo sumó su gol 46 en el torneo. En 91 partidos. A Eusebio le bastaron 64. El 'siete' blanco, sin embargo, dejará atrás la cifra pronto. En unos pocos partidos. En el presente ejercicio suma siete en siete, su número.

Con el público madridista irremediablemente entregado el conjunto de Jose Mourinho, acaba por ser en muchos partidos 'Ronaldo y diez más'. Ante el Manchester United no rehuyó la cara al asunto en ningún momento. Todo lo contrario. Asume su condición y tira del carro. Así ocurrió en cuanto el United, por medio de Danny Welbeck se puso por delante en el Bernabeu. Cristiano torció el gesto y se arrancó con una mirada desafiante. Había puesto a prueba ya en varias ocasiones a David De Gea, que por momentos sostuvo al representante inglés.

Pero el español no pudo con la jugada que valió una Copa. La que enterró el sambenito de que el luso no aparecía en los momentos importantes. La que le proporcionó su primer título en España. La que le valió para derrumbar al todopoderoso Barcelona. Fue la misma de entonces. Con menos minutos a las espaldas. Pero similar ejecución.

Un centro del argentino Ángel Di María con la izquierda. Con rosca. Hacia el aire. Y un salto imponente del portugués. Sostenido en el aire y directo a la red. Lo intentó después más veces. Pero sin puntería. Sin acierto. En cada una se topó con De Gea, que ha crecido en Inglaterra, aunque aún tenga que pulir situaciones de juego aéreo.

El gol mantuvo en pie al Real Madrid en el reencuentro con la Liga de Campeones. En un choque abierto que pudo ganar. Pero también perder. Cristiano, otra vez, mantuvo el tipo para el Real Madrid, a la espera de que Old Trafford decida. El "teatro de los sueños" donde el portugués cumplió gran parte de los suyos y que fue su casa.