El récord de Müller quedó en un segundo plano tras un minuto de fatalidad en la noche del Camp Nou. El fútbol tiene estas cosas. Todo el mundo está preparado para la fiesta, pendiente de un detalle, y nadie repara en que un lance fortuito pudo cambiar el rumbo de un equipo y de una temporada.
El barcelonismo vivió en vilo, pendiente del estado de un chico de Rosario cuya posible lesión pudo ser un auténtico terremoto para los cimientos del club azulgrana. Es en momentos como los de anoche, no en los sucesivos goles y récord que destroza, cuando uno se da cuenta hasta que punto Messi es la piedra filosofal de un club centenario como el Barcelona.
El partido quedó en un segundo plano. Las acciones de Rafinha, el gran primer tiempo del Benfica que injustamente se fue sin goles en su casillero al descanso, el acierto de Pinto o el pundonor y la lucha de Carles Puyol.
Al final, el pronóstico de Leo Messi fue la mejor noticia para el FC Barcelona en lo que va de temporada. Todo quedó en una contusión en la cara externa de la rodilla izquierda. Una suave caricia para lo que durante unos minutos temió el barcelonismo.
La lesión de Messi fue la consecuencia de un partido que poco a poco se fue volviendo más bronco, pese a que la lesión del argentino llegara en un lance fortuito con Artur. El partido subió en intensidad conforme mejoraba el juego del Barcelona, emborronado en una mala primera parte.
La apuesta por la versión 'B' no le salió bien a Tito Vilanova. El estilo era el mismo, la precisión no tanto. Rafinha, Thiago o Song ni se acercar a la calidad de Iniesta, Xavi o Cesc.
El Benfica aprovechó las inusuales pérdidas de balón para poner cerco a la meta de un inspirado Pinto. El meta gaditano evitó algún que otro gol cantado. El poste robó el tanto a Lima y Rodrigo perdonó una ocasión inmejorable en el incio.
Tras el descanso el Barcelona cambio la cara, apoyado en Tello y la entrada de Messi. Poco a poco el equipo detIto Vilanova fue volcando el campo hacia el área del Benfica. El partido se calentó hasta ese minuto fatal en el que la rodilla de Messi puso en vilo a todo el Camp Nou. Un susto de camino a los octavos de final. La 'Pulga' seguirá buscando esops goles y esos récords.