BÁDMINTON

Carolina Marín: "De París me traje una medalla en forma de amor y cariño de toda la sociedad española"

La histórica jugadora de bádminton española recibe este viernes el Premio Princesa de Asturias de los Deportes.

Roberto Gómez Ramos

Madrid |

Carolina Marín: "De París me traje una medalla en forma de amor y cariño de toda la sociedad española"

Carolina Marín ha sido protagonista este jueves en el programa especial de Radioestadio Noche desde Oviedo con motivo de los Premios Princesa de Asturias que la premiarán este viernes con el Premio Princesa de Asturias de los Deportes por su carrera deportiva como jugadora de bádminton. La onubense ha sido campeona olímpica, tricampeona del mundo y heptacampeona de Europa de bádminton femenino.

"Está siendo todo muy bonito (...) He tenido una acogida increíble, cuando salí del hotel y de repente escuché todas las gaitas sonando se me pusieron los pelos de punta", ha explicado la jugadora que lleva varios días en Oviedo.

Ha sido una de las protagonistas del año en el deporte español por su desgraciada lesión en las semifinales de los Juegos Olímpicos de París, cuando buscaba disputar su segunda final olímpica.

"Iba con un objetivo muy claro a París, que era el de conseguir mi segundo Oro olímpico, pero al fin y al cabo las medallas al día siguiente las guardo en el cajón. Me he traído una medalla de París que en mi vida me podía imaginar que se podía conseguir: el amor y el cariño de toda la sociedad española. Una medalla de empatía y admiración mutua. Esa la llevo en mi corazón para toda la vida", ha contado sobre la última cita olímpica.

La jugadora española también ha recordado las dos experiencias olímpicas anteriores en Río 2016 y Tokio 2020. En Brasil consiguió el que fue el primer y, hasta el momento, único oro olímpico de una jugadora no asiática en su deporte y asegura que recuerda todos y cada uno de los golpes del último punto de la final. "Lo recuerdo como si hubiera sido hace un ratito".

En Japón finalmente no pudo competir por una lesión, aunque asegura que "si no me hubiera lesionado, estoy totalmente segura de que en Tokio me habría llevado la medalla de oro".

A sus 31 años y tras su grave lesión en París llevamos semanas escuchando rumores de retirada. "Me planteaba retirarme el año que viene en el Mundial de París, pero ahora las circunstancias son diferentes. No pienso en ese Mundial porque no llego y porque no he vuelto a coger una raqueta desde que me rompí la rodilla (...) Las asiáticas suelen retirarse a los 24-25 años, yo ya estoy pasada de rosca", reconoce entre risas", reconoce.

"Hace dos meses y medio te habría dicho que quería colgar la raqueta ya, pero a día de hoy tengo una ilusión muy grande que es jugar y disputar el Campeonato de Europa que se va a hacer en España en 2026 y ojalá que se haga en Huelva", ha explicado.