Enrique Moreno: "la belleza es posible hasta en un quirófano"
En “Por fin no es lunes” hablamos con Enrique Moreno, eminencia mundial de la cirugía y autor del libro “El cirujano”. Por sus manos han pasado personajes tan populares como Raphael o Cayetano Martínez de Irujo. A sus 81 años continúa en activo
El doctor, Enrique Moreno es pionero en trasplante hepático y en cirugía de enfermedades complejas gastrointestinales, pancreáticas y biliares. Ha recibido el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica y es académico de la Real Academia Nacional de Medicina de España. Ahora se ha lanzado a la aventura de escribir. En su libro “El Cirujano” desgrana, en clave de ficción, los entresijos de su larga experiencia profesional. Relata, en una obra de 600 páginas escritas a mano, cómo es la vida de los hospitales, de los cirujanos y de los pacientes.
La cirugía tiene un componente artístico
Enrique Moreno asegura en “Por fin no es lunes” que “en un quirófano, el cerebro es el que manda, pero si las manos no expresan lo que el cerebro le lanza, se queda a mitad de camino”. Dice que un cirujano que no sabe dibujar, encontrará limitaciones. Si las manos de un cirujano se mueven bien y el equipo también actúa en sincronía, se puede ver cierto arte en un quirófano. “Una operación es como una pintura rosa”.
“Un quirófano puede ser como una capilla orquestada o como una guerra”, sostiene. “Si la orquesta tiene músicos buenos y están bien afinados, el trabajo conjunto se desarrollará bien y no habrá ni guerra ni escaramuza”.
Un cirujano no es un Dios
Enrique Moreno afirma que “un cirujano no es un médico superior” pero sí tiene unas virtudes que pueden establecerse o bien nacer con ellas”. En un quirófano no se puede tener cansancio, el equipo se mantiene unido en intervenciones que pueden llegar a durar hasta 17 horas.
Para el doctor los momentos más complicados de su carrera han tenido que ver con los trasplantes de órganos y con la cirugía y el tratamiento de los tumores y cáncer en general. En algunos momentos “hay que improvisar y salirse del guion para que la música termine sonando bien”, dice.
Falleció su padre mientras operaba
El cirujano vivió un momento especialmente duro el día que falleció su padre. Él estaba operando en la Clínica de la luz, cuando su padre ingresó en el mismo hospital. Los compañeros le dijeron que abandonara el quirófano, pero él decidió continuar con la operación. “Cuando terminé la intervención, mi padre acababa de fallecer”.