Santiago Sánchez Cogedor va a cumplir un año en una cárcel de Irán.
El 2 de octubre de hace 365 días Santiago se encontraba camino a al mundial de futbol de Qatar. Santiago salió de Alcalá de Henares en enero de 2022 con la idea de ir andando hasta Qatar y aprovechar su viaje para concienciar de la contaminación por el uso de plásticos. Por el camino fue haciendo voluntariado en cada ciudad que pasaba. Pero en octubre entra em Irán y todo cambia. Santiago es detenido y acusado de espionaje. ¿La causa? Subir a las redes sociales una foto con un grupo de kurdos en las que detrás aparece un muro de un edificio militar.
Su situación la hemos seguido en los medios y se ha elevado a la preocupación nacional, aunque los movimientos que ha intentado hacer el Ministerio de Exteriores en los últimos meses no han dado resultado.
Ahora, cuando se acerca el primer año de su encarcelamiento, el estado de ánimo de Santiago le ha llevado a tomar la decisión de hacer huelga de hambre.
Lleva 6 días sin comer y ya ha perdido "6 kilos". El director de la prisión ha ido a verle y le han dejado visitar a un médico y a un dentista.
José Félix, amigo íntimo de Santiago, explica que el español "recibió el 20 de septiembre una llamada del embajador español y le volvió a pedir más tiempo. Dos meses más para sacarle de prisión".
José asegura que Santiago "es inocente y por eso empezó con la huelga de hambre". Ahora ha parado, pero si el 20 de noviembre no le han sacado, volverá a dejar de comer".
Su amigo critica que en la prisión de Irán "se preocupen más de él que su propio país" y asegura que el español "no tiene cargos. Solo tienen una foto".