Se trata de un proyecto pionero en España que se inspira en las Madres de día: profesionales de la educación que ofrecen en su propia casa un servicio de cuidado de niños menores de 3 años. Este sistema está muy extendido en países como Alemania, Inglaterra, Suecia, Holanda o Francia.
Aquí en España el modelo gallego es único porque no hay otra comunidad autónoma donde se pague con fondos públicos a las madres de día por su trabajo. Este tipo de crianza solo está regulado y sometido a controles en Navarra, Comunidad de Madrid y Galicia.
Conversamos con Rocío Alonso, que es Madre de día y desde hace un año está al frente de su propia casa nido a la que ha bautizado como “Arenita de Colores”.