Nuevos indicios de la existencia del Planeta Nueve
¿Existen indicios de un noveno Planeta? ¿Hay riesgos de que se estrelle contra nosotros? En Por fin no es lunes, en Divulga que algo queda Mario Viciosa nos da las respuestas a estas cuestiones. Además, nos resuelve la duda de la semana: ¿Cómo escuchan los insectos?
En Por fin no es lunes nuestro divulgador científico, Mario Viciosa, nos descubre todos los secretos sobre la existencia de un noveno Planeta. En la película Melancholia de Lars Von Trier se plantea el descubrimiento súbito de un noveno planeta rocoso en el sistema solar. El planeta había quedado oculto durante siglos y lo que empieza a hacerse visible como una pequeña estrella nueva en el firmamento, se convierte en todo un astro enorme en los cielos de la Tierra, amenazando con impactar contra ella y destruirla. Esta ficción bebe de una larga tradición astronómica de personajes que han hecho mil conjeturas sobre la posibilidad de que existiera un planeta más en nuestro vecindario. Y ahora resulta que hay nuevas pruebas de que algo podría haber. Pero ¿hay riesgo de que se estrelle contra nosotros?
Todo puede pasar. Estamos en un periodo de la historia en que pensamos que casi todo es posible. Lo nunca visto y lo catastrófico. Y no es de extrañar. Pero esto del planeta nueve es tan viejo como el descubrimiento de Plutón. Y no hay ningún indicio de que haya por aquí algo pululando que vaya a destruir la Tierra. Pero sí que hay algún indicio de que pudiera haber un noveno planeta dando vueltas alrededor del Sol. Es lo que llaman el Planeta X, o al menos así lo llamó el astrónomo Percival Lowell en 1906. Y hasta hace no mucho algunos pensaban que lo de X era un 10 en números romanos. Por aquello de que, hasta que se cargaron a Plutón, había nueve planetas en el sistema solar. Pero no, porque Plutón se confirmó en 1930. O sea, que en la época de Lowell sólo había ocho, como ahora. Ocho planetas grandes que merezcan el nombre de 'planeta' sin apellidos. Porque luego hay planetas enanos. Si contamos todos, tendríamos 12. O 13 si se confirma algún día la teoría del planeta X o noveno planeta. Porque algunos creen que ese planeta por descubrir sería todo un señor planeta rocoso bien grande.
Y si es un planeta grande, ¿por qué no lo vemos con la cantidad de telescopios que tenemos? Pues porque nuestro vecindario galáctico es escurridizo y no deja de darnos sorpresas. La última ha venido de la mano del astrónomo Michael Rowan-Robinson. Este veterano ha desempolvado sus viejos archivos y ha dicho que lo mismo descartó muy pronto que tenía pruebas del planeta X. En 1983 estaba como loco usando el primer telescopio de infrarrojos que había montado la humanidad. Pero ahí no llegó a ver nada Rowan-Robinson en los ochenta y tiró la toalla en 1991. Sin embargo, ahora dice que hay tres puntos en las imágenes de entonces que indican que algún objeto se debía de mover por el cielo.
Unos planetas ponen a bailar a otros
Hay mucho cielo por mirar. Lo curioso es que si damos con el planeta nueve, lo mismo lo hacemos gracias al descubrimiento de algún otro planeta que esté más a la vista. Por la manera en que se mueven, podemos determinar que hay algo más. Un planeta desvía la órbita de otro. Una estrella, aún más, al punto que suele hacer girar a casi todo a su alrededor. Y un agujero negro, ni te cuento. Pero no tendría por qué haber necesariamente un planeta enorme para explicar qué pasa ahí arriba. Podría ser algo que no se ve. Un agujero negro. Eso sí, sea un planeta un agujero negro u otra cosa, debería tener 15 veces la masa de la Tierra. Así que mejor que no impacte con nosotros. Lo más probable es que el planeta nueve sean más bien cachitos de planeta. Escombro rocoso.
Por cierto, ¿quieres saber cuál es la respuesta a la duda de la semana? ¿Cómo escuchan los mosquitos? Pues presta atención.