Pablo Pombo: "El populismo es tan divisivo que ha logrado dividir hasta el feminismo"
Pablo Pombo analiza en 'Por fin no es lunes' la trascendencia de la ley del solo 'sí es sí' como la causante de considerar a Sánchez como el presidente que más daño ha hecho a la causa feminista mientras Podemos la divide.
Semana clave, histórica para que se desvele por fin el nuevo enigma que tanto atormenta a Pedro Sánchez, esa pregunta que le hace a todo el mundo todos los días: ¿cómo crees que pasará a la historia? Pues lo va a descubrir el próximo miércoles. El próximo 8 de marzo, Sánchez, descubrirá que pasará a la historia como el presidente que más daño ha hecho a la causa feminista.
Pocos se esperan un acuerdo para reformar el terrible desastre provocado por la ley del solo 'sí es sí' antes de esa fecha. Desde luego, en eso que el Gobierno llama efectos no deseados para edulcorar la realidad. No son efectos indeseados, son las duras consecuencias reales de un error que podría haberse evitado que muchas y muchos avisaron y que la soberbia no quiso evitar.
Nos estamos acostumbrando a números que no deberíamos aceptar. Vemos la cifra de condenados de condenados beneficiados, la de excarcelados y se nos hace hasta abstractas como nos pasó antes en la pandemia. No nos hacemos a la idea de lo que esos dos marcadores que no paran de subir significan para las víctimas.
Y luego, está el plano de la opinión pública horrorizada al ver cómo los intereses electorales juegan en uno de los asuntos más serios que puede sufrir cualquier sociedad. Por un lado, Sánchez decidió que había que reformar la ley no por una cuestión moral sino porque las encuestas eran malas y, por el otro, los socios de Podemos han convertido esta cuestión en un motivo de confrontación con el PSOE para ver si así pueden rascar algo de las próximas urnas, así de venenoso, de divisivo es el populismo así de ajeno al bien común. Es tan divisivo que ha logrado dividir hasta el feminismo, fracturar al movimiento social que más avances en libertades y derechos ha conquistado en toda la historia de la democracia.
Irene Montero ha provocado una brecha ideológica y, también, generacional que vamos a ver reflejado también en las calles en un día en el que tendría que ser de celebración y que, desgraciadamente, será de división. Hasta que podemos no salga del Gobierno, los españoles y las españolas no tendremos ocasión de reparar el daño que ha hecho Podemos por su dogmatismo, por su ineficacia y por su mercedad.