Madrid |
Robar en la desolación. Son ya 186 detenidos por cometer pillaje. Por robar, primero aprovechando el caos y después abusando de damnificados que no dan abasto para vigilar, atender y solucionar todos los frentes de su dolor.
¿Cómo es posible que tengan que organizarse incluso para custodiar las bombas de agua que ayudan a limpiar el cenagal? Es lo peor del ser humano en medio de una tragedia que ha arrasado las vidas de miles y miles de personas en lo que desde hoy se considera zona catastrófica.
Una DANA tan brutal que ha dejado en segundo plano asuntos tan relevantes como lo ocurrido con Íñigo Errejón, el registro e incautación de papeles y dispositivos en el despacho de todo un fiscal general del Estado y hoy mismo la decisión del Supremo de ir adelante con la investigación a Ábalos.