La Guardia Civil atribuye un papel preeminente al fiscal general del Estado en la filtración de los correos del novio de Ayuso y su pacto con la fiscalía.
Lo hemos sabido después de que el juez levantara una parte del secreto del sumario. Que si que la UCO está convencida de que Álvaro García Ortiz está detrás de esa operación para beneficiar al Gobierno. Es más, Juan Lobato, líder de los socialistas madrileños ha reconocido en Onda Cero con Alsina que fue a la notaría para registrar documentos y conversaciones de whatsapp.
Se publica que se trataba de documentos que le envió Moncloa para incriminar al novio de Ayuso y que él se negó a utilizar. La espúrea utilización del aparato del Estado para combatir al enemigo político es propio de políticos que cuando están en el poder se sienten dueños y señores de todos los resortes que, por supuesto, no dudan en utilizar en su propio beneficio.