OPINIÓN

Monólogo de Alsina: "No vas a tener cáncer por comer tocino ahumado, pero hay que intentar no pasarse"

Por más que Rajoy haya convocado elecciones y se apareciera en televisión para responder a las preguntas de Ana Blanco, de lo que se sigue hablando en la cafetería, en la oficina y en la puerta del colegio es del rodillazo de Rossi a Marc Márquez -indignados todos porque amamos, ¿verdad?, el juego limpio—- y de este otro rodillazo que la Organización Mundial de la Salud le ha arreado al plato combinado —-en estado de shock la Humanidad porque todos amamos, no me diga que no, la salchicha con su loncha de bacon y su huevo frito—. El huevo, de momento, se salva.

ondacero.es

Madrid | 27.10.2015 08:09

Es la carne procesada la que, según la OMS, es cancerígena. O carcinógena. Y la carne roja, probablemente. Esa mirada de desconfianza que les vas a dirigir este martes a la salchicha frankfurt, a la lonchita de salchichón, ¡y al bacon! Serás tú, bacon traicionero, serás tú. Esa mirada desconfiada que le vas a dirigir antes de metértelo en la boca y comértelo tan a gusto, que es lo que al final vas a hacer, que te estoy viendo. Dices: ahora que he dejado el tabaco, que he quitado todo el amianto de casa y ya no inhalo sulfuro de níquel, y lo que me está poniendo enfermo es el plato combinado.

Este informe de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer, tan impactante, ha sido matizado, o rebajado, por las autoridades de consumo —-y por los productores de embutido— que aclaran que no se trata de que te vaya a dar cáncer por comerte una loncha de tocino ahumado. Que se trata de no pasarse con la ingesta. A ver, si te metes tres kilos de bacon al día no es que tengas cáncer, es que no tienes conciencia.

Y como dice el señor Chistopher Wild, director de esta Agencia Internacional, hombre, debe tenerse en cuenta que la carne roja tiene un gran valor nutricional. Mucho. La evolución del hombre y de su cerebro le tiene mucho que agradecer a la carne. Y estamos tan necesitados de cerebro, de cabeza, como para prescindir de la carne a estas alturas de nuestra sufrida existencia.

Este martes es el día en que se abrirá la caja. La caja 507, como en la película. Qué será lo que guarda esa caja. Es este lunes cuando el juez de El Vendrell procede a abrir la caja de seguridad que uno de los detenidos en la operación del 3% entregó a un amigo para que se los guardara. O en rigor, para esconderlos. Para que los investigadores de la policía judicial no pudieran encontrarlos. Ay, la caja. Según la versión facilitada por los investigadores, el señor Rosell i Polo, adjudicador jefe en la corte del rey Artur, recogió un montón de papeles al temer que acabaran registrando su despacho —“vienen a por mí”, le dijo al amigo—- y se los entregó a una persona de su confianza para que se los guardara. Sería de su confianza, pero debió de pensárselo mejor cuando vio que empezaba la redada porque acudió a la guardia civil a entregarlo todo. Ay, la caja. Hoy desayunan tila los dirigentes de Convergencia Democrática. Qué habrá metido ahí, qué papeles y con cuántos nombres, Rosell i Polo. Este usuario consumado de la puerta giratoria que estaba a ratos en la administración, adjudicando contratos, y a ratos en la empresa privada, haciendo dinero con los contratos adjudicados.

No fue un “¡viva el 3%!” lo que se escuchó en el Parlamento catalán, sino un “viva la república catalana” en boca de la nueva presidenta de esa cámara. La república independiente catalana, como explica el singular Romeva, sería un paraíso de higiene y buenas prácticas, sin esta corrupción tan penosa que, aun protagonizada por tesoreros convergentes y empresarios afines, la atribuye el independentismo al contagio de España. “Viva la república catalana” dijo la señora Forcadell, que empezó hace años de concejal de Esquerra y ha llegado a presidenta esquérrica del Parlamento.

Y viva el fuet. Forcadell sigue donde ha estado siempre, en la actividad (o el activismo) político, bajo la apariencia de esto que Mas y Junqueras bautizaron como “la sociedad civil”. La primera declaración pro independencia se ha producido ya, en boca de la señora presidenta. Rajoy responde que tendrá mano izquierda para no llegar a la suspensión de la autonomía.

A cuatrocientos kilómetros de Canarias sigue la búsqueda de los tres militares del helicóptero accidentado el jueves. Hay que encontrar el aparato para esclarecer si pudieron abandonar el helicóptero antes de que éste se hundiera. El hecho de que no haya habido señal alguna de ninguno de los tres en todos estos días alimenta la hipótesis de que pudieran haber quedado atrapados. Se han sumado a la búsqueda dos cazaminas de la Armada con sus sónar y tiene intención el ministro Morenés de desplazarse hoy desde la base de Gando a uno de los buques que participan en la búsqueda.

La hipótesis del secuestro ha ido perdiendo peso porque los expertos admiten esto que ya apuntamos ayer: que sería el primer caso de secuestro en esas aguas y que tendría que haberse dado una circunstancia bien poco probable, que es que los militares fueran rescatados por piratas o socios de piratas. Aunque el ministerio de Defensa mantenga l que todas las hipótesis están sobre la mesa, el secuestro es una opción más teórica que real. No se pierde la esperanza de que el capitán Morales, el teniente López Quesada y el sargento Ojeda hayan sobrevivido, pero lo cierto es que nadie llegó a ver el interior de la cabina antes de que ésta se hundiera. El barco holandés que trató de mantenerlo el helicóptero a flote desembarcó a un marinero en un bote para tratar de amarrarlo, pero ya estaba semihundido y no alcanzó a poder verificar la presencia, o no, de personas en el interior. Es probable, también, que el helicóptero boca abajo con los flotadores inflados pudiera haberse confundido, desde el aire, con una balsa neumática de supervivencia.

Las familias de los tres militares recibieron anoche la información de que dispone Defensa, deseando, lógicamente, tener certezas, en una reunión con el ministro Morenés.