Monólogo de Alsina: "Te recibimos con alegría"
Carlos Alsina reflexiona en su monólogo sobre la llegada de Joe Biden a Madrid con motivo de la cumbre de la OTAN y critica al Gobierno por adoptar el discurso de la extrema derecha tras el último salto de la valla de Melilla.
Madrid | 28.06.2022 08:58 (Publicado 28.06.2022 08:56)
Te recibimos, americano, con alegría. Biden está al caer. Qué nervios en la Moncloa. Por fin podrá hablar un rato largo Sánchez con el presidente de los Estados Unidos.
El encuentro bilateral entre Sánchez y Biden con un año de retraso
Seguro que donde quiera que esté, Iván Redondo pensará que se ha cumplido aquello que él anunció: el encuentro bilateral entre estos dos prohombres del progresismo planetanerio. Bien es verdad que con un año de retraso, porque Redondo lo anunció para la cumbre de la OTAN de 2021.
Pero ya está llegando Biden. Con su Air Force One. Con su limusina blindada de nueve mil kilos. Con su séquito de tropecientas personas. En fin, lo que vienen siendo los accesorios propios de un presidente de los Estados Unidos. Y con una chuleta que le han hecho para no despistarse con el quién es quién y dónde tiene que sentarse. En fin, lo que viene siendo Biden.
No es Eurovisión, no organiza la cumbre quien más éxito tuvo
Hace un año, en efecto, Sánchez y él ya pudieron verse cincuenta segundos en una cumbre de la OTAN. Porque cumbre de la OTAN hay todos los años y no siempre las organiza España, créaselo. Bruselas, Londres, París, Chicago, Varsovia, por citar las sedes de las últimas cumbres.
El equipo de publicistas gubernamentales esté empeñado en trasladar la idea de que esto es un homenaje a Pedro Sánchez
Naturalmente que es una responsabilidad organizar un sarao de esta dimensión y estas características -coincidiendo, además, en Madrid con el día del Orgullo, bendita coincidencia-, y naturalmente que es una oportunidad para promocionar el país y estrechar relaciones entre gobernantes. Pero el motivo de que se haya aceptado la propuesta de España es que cumplimos cuarenta años como socio. Esto no es Eurovisión, no organiza la siguiente cumbre el que más éxito tuvo en la anterior.
Lo digo porque el equipo de publicistas gubernamentales esté empeñado en trasladar la idea de que esto, más que una reunión de la OTAN, es un homenaje atlántico al presidente del gobierno de España. Y tampoco.
Cómo reprocharle a Felipe Sicilia que se derrita en alabanzas a su presidente
Vamos a disculpar a Felipe Sicilia este arrebato jabonoso a mayor gloria de su líder porque él, después de todo, es un subordinado que tiene presente que hace un año Sánchez hizo una purga de la que salió descabezado el mismísimo José Luis Ábalos. Cómo reprocharle, visto así, que se derrita en alabanzas.
Lo principal de esta cumbre que trae a Biden y una legión de poderosos políticos a España es que desde febrero se está librando una guerra en Ucrania. Lo principal es que ha emergido Putin como amenaza inmediata a la seguridad de los vecinos de Rusia. Incluidos los que forman parte de la OTAN.
Lo principal de esta cumbre de la OTAN es que desde febrero se está librando una guerra en Ucrania
Putin con los métodos tradicionales de agresión -sus misiles, sus tanques, sus miles de soldados-; y con los métodos de nuestro tiempo -sus ciberataques, sus maniobras de desestabilización, sus gasoductos y su petróleo-.
Lo principal es que, fruto de esa guerra, los gobiernos que antes arrastraban los pies ahora están en primer tiempo de saludo para destinar más dinero público a la Defensa y al sostenimiento de la OTAN. Entre ellos, el nuestro.
Fruto de esa guerra la Alianza se revaloriza y crece
Y lo principal, en fin, es que fruto de esa guerra la Alianza se revaloriza y crece: tiene a Finlandia y Suecia, hitos de la neutralidad de otro tiempo, llamando a la puerta para compartir gastos y acceder a la seguridad que, yendo por libre, han llegado a la conclusión de que no tienen. Todo ello con permiso de Ione Belarra y de su canto general a los países no alineados.
Te recibimos, americano, con alegría… porque no eres Trump. Que si no, ya te estarían pitando los oídos.
Cuatro días después, el Gobierno de España no quiere saber nada
Declara un joven llamado Huséin a las puertas del Centro de Internamiento Temporal de Inmigrantes de Melilla: ‘Los sudaneses no tenemos mafias. Venimos juntos. No pagamos nada. Sólo utilizamos nuestra cabeza para salir de Marruecos. El mafioso es Mohamed VI, que cobra de Bruselas para tenernos controlados’.
Los sudaneses no tenemos mafias. El mafioso es Mohamed VI, que cobra de Bruselas para tenernos controlados
Lo leo en la crónica de Francisco Perejil en El País. Declara Adam, veintiúna años, sudanés, internado en el CETI: ‘He llegado hasta aquí y eso es lo que quería. Todos estos jóvenes que han muerto aquí tenían grandes sueños, querían salir adelante’.
La valla de Melilla. Cuatro días después, el Gobierno de España no quiere saber nada. Lo que hiciera la policía marroquí bien hecho está. Después de todo estaba velando por la integridad territorial de nuestro país, ahí es nada.
El presidente, y su disciplinado equipo de ministros, está hondamente satisfecho con Mohamed VI. En ocaciones ve asaltantes que hacen peligrar la soberanía española de Melilla
El presidente, y su disciplinado equipo de ministros que recitan argumentarios, está hondamente satisfecho de su acuerdo con Mohamed VI. Tan satisfecho y tan hondamente que en ocaciones ve asaltantes que hacen peligrar la soberanía española de Melilla. Asaltantes armados con palos y navajas que Mohamed se ocupa de mantener a raya como sea.
Alabado sea el rey marroquí que preserva la españolidad de nuestras ciudades frente a los asaltantes invasores. Qué tremendo.
Si la ministra de Igualdad acepta, sumisa, la humillación de que fue objeto ayer en la rueda de prensa del Consejo de Ministros, allá ella
Lo de menos, en esta historia de Nador, es si el Gobierno de España está dividido sobre el asunto porque el Gobierno de España está dividido en el noventa por ciento de los asuntos sobre los que opina. Lo de menos es que a Irene Montero la silenciara ayer en la rueda de prensa del Consejo de Ministros la portavoz Isabel Rodríguez. Si la ministra de Igualdad acepta, sumisa, la humillación de que fue objeto ayer en la rueda de prensa del Consejo de Ministros, allá ella.
Toda la culpa la tienen las mafias
El reparto de papeles dentro del Gobierno, insisto, es lo menos relevante en esta historia. Tampoco es lo más relevante que los ministros le hagan los coros al presidente repitiendo el salmo responsorial éste de que toda la culpa de cualquier cosa que pase en la frontera la tienen las mafias.
‘No oigo hablar de las mafias’, dice Grande Marlaska. Hombre, la existencia de mafias no es nueva. Aunque estos sudaneses, ministros, niegan que hayan sido utilizados por nadie. Los intentos de saltar la valla tampoco son nuevos.
Lo nuevo es que treinta personas mueran en el intento sin que ninguna autoridad se digne a explicar por qué y cómo ha pasado
Lo nuevo, lo que no había ocurrido nunca, es que treinta personas mueran en el intento sin que ninguna autoridad se digne a explicar por qué y cómo ha pasado. Pero tampoco es lo más relevante que el Gobierno, en su empeño por maquillar la gelidez con que el presidente despachó este asunto como un mero problema de orden público (bien resuelto) se declare ahora verdaderamente conmovido, con tres días de retraso.
Un presidente deshumanizado
Habríamos dejado de ser humanos. En efecto, ésa fue la impresión que dio Sánchez el sábado. La de un presidente deshumanizado. Pero las emociones del jefe del Gobierno tampoco son demasiado relevantes. Sí que lo es la nueva doctrina que ha abrazado la parte socialista del Gobierno sobre los intentos de saltar la valla de Melilla o de Ceuta.
El discurso de la autodefensa. El discurso que siempre hizo la extrema derecha. Esto sí es un salto, presidente
Esto sí es lo más relevante: que el Gobierno progresista haya hecho suyo el relato extremista, y distorsionado, según el cual un grupo de subsaharianos pobres de solemnidad saltando la valla para llegar a Europa deben ser frenados no porque haya normas que cumplir para que la inmigración se produzca de forma ordenada, sino porque estos subsaharianos son una amenaza para la integridad de las ciudades españolas.
El Gobierno progresista hace suyo el discurso de la extrema derecha
Un peligro para nuestra existencia. Como si desharrapados, con sus palos y sus navajas, aspiraran a desmembrar las ciudades españolas en el norte de África.
El discurso de la amenaza que suponen. El discurso de la autodefensa. El discurso que siempre hizo la extrema derecha. Esto sí es un salto, presidente. Incluso un asalto. A la inteligencia.