Monólogo de Alsina: "Esta operación salida es una ruina"
Desde el Teatro Romano de Mérida, Carlos Alsina reflexiona en su monólogo sobre la inflación y los precios que la gasolina alcazará coincidiendo con la operación salida que comienza hoy. Además, hace un balance de la cumbre de la OTAN en Madrid, tras la cual Sánchez tiene el reto más difícil: lograr la unidad de su propio Gobierno.
Madrid | 01.07.2022 08:52
Para aquellos que hoy inician sus vacaciones de verano, nuestro deseo de que las disfruten. Para aquellos que hoy vais a participar en la operación salida, nuestro deseo de que al llenar el depósito del coche no os dé un jamacuco.
La inflación la tenemos en dos dígitos, 10%, pero llenar el depósito está en tres dígitos: ciento diez euros de sin plomo para un tanque de cincuenta litros; ciento seis el depósito de diésel.
El primer zurriagazo de las vacaciones le va a doler a la España automovilista en las gasolineras
Media de España. Si tiene un coche grande en el que caben más litros -no hace falta que sea como el de Joe Biden- pues eche números. Bueno, ya se los echará el cajero de la gasolinera. Con descuento y todo, el primer zurriagazo de las vacaciones le va a doler a la España automovilista.
El mismísimo Julio César inaugura hoy el Festival de Teatro Clásico de Mérida
Nos hemos venido a Mérida a celebrar este primer día de julio; a disfrutar de la hospitalidad extremeña y de su Teatro Romano. Augusto teatro. Quién le habría dicho al cónsul Agripa que su teatro acabaría siendo, veinte siglos después, un estudio de radio. Con sus micrófonos, sus locutores, sus anuncios.
Hemos venido a anunciar que esta noche comienza el Festival de Teatro Clásico. Viene el mismísimo Julio César a inaugurarlo. Un Julio César argentino, como el profesor Rodríguez Braun. Y peculiar, porque en esta adaptación de Shakespeare, César es usted, señora. Una mujer. Que pelea por el poder y hace campaña de sí misma.
[[H3:'Yo Yolanda on tour’. En concierto. Ríete tú de Miguel Ríos]]
Como Yolanda Díaz, que también vendrá por aquí, supongo, en la gira veraniega que empieza el día ocho. Aquí la hemos bautizado como ‘Yo Yolanda on tour’. En concierto. Ríete tú de Miguel Ríos.
Bueno, para la próxima cumbre de la OTAN que organice Sánchez, tome nota presidente: éste es un magnífico lugar para traerse a los gobernantes y sus parejas. Ahora que ya conocen todos el museo del Prado, que se vengan a conocer Mérida.
Esto lo repiten todos los gobiernos de la OTAN estos días: todo es culpa de Putin
Imaginaos una mesa gigante en el escenario, con los Biden, los Macron, los Sánchez; los Reyes, por supuesto, disfrutando de unas migas, unas berenjenas en vinagre (unas migas euroatlánticas), una caldereta oceánica, un cojon-dongo estratégico. Mientras comentan lo bien que se conserva la diosa Ceres, y lo caro que se ha puesto el cereal por culpa de Putin.
Culpa de Putin también es que la OTAN haya salido tan fortalecida
Todo es culpa de Putin. Que es muy burranco. Esto lo repiten todos los gobiernos de la OTAN estos días: todo es culpa de Putin. ¿La guerra en Ucrania? Por supuesto. ¿La subida de los precios? También. Hombre, culpa de Putin también es que la OTAN haya salido tan fortalecida de la cumbre de Madrid. Y que ahora sea vista por casi todo el mundo como una organización imprescindible para poder defendernos si algún día Putin, o el chino, o quien sea, viene a por nosotros.
Incluso los Gobiernos de algunos países OTAN, que hasta enero arrastraban los pies cuando se les pedía que aportaran más dinero, o que estaban en la tesis de que había que potenciar la defensa europea para depender menos de los Estados Unidos, ahora le hacen la ola a Joe Biden y anuncian incremento de sus presupuestos de Defensa. Y de su aportación a la caja común de la OTAN.
La cumbre ha resultado un éxito
La cumbre ha resultado un éxito, sin duda, para España y para el Gobierno de España. Stoltenberg, el noruego, en nombre de todos los países socios ensalzó ayer el trabajo que ha hecho Sánchez.
Perfecto, impecable, excelente. Qué más se puede decir. Feijóo ha felicitado al Gobierno por la imagen que ha transmitido de España, qué te parece. A lo mejor, de ésta, el Gobierno acaba por comprender que los elogios tienen valor cuando te los hacen los demás, no cuando te regalas tú los oídos a ti mismo.
A lo mejor, de ésta, el Gobierno acaba por comprender que los elogios tienen valor cuando te los hacen los demás
Sánchez ha subrayado lo relevante que es la unidad que han exhibido los treinta gobiernos OTAN. Incluido Turquía respecto de la ampliación a Suecia y a Finlandia. Y ahora que ha logrado el presidente la unidad de sus treinta colegas le queda lo más difícil, que es lograr la unidad de su propio Gobierno.
Le queda lo más difícil; lograr la unidad de su propio Gobierno
Es más fácil convencer a Suecia y a Finlandia de que pacten con Erdogan que convencer a Ione Belarra e Irene Montero de que pacten con Margarita Robles. Así son las cosas en el gobierno de coalición. Belarra ya anda diciendo que eso de aumentar el Presupuesto de Defensa lo tendrán que hablar con ella. Y que meter más destructores estadounidenses en Rotano es propio de un Gobierno progresista que tiene otras prioridades. Claro que para Belarra ayudar a los ucranianos a pararle los pies a Putin nunca fue una prioridad.
Feijóo para Sánchez es Darth Vader. El lado oscuro de la fuerza.
El PP se ofrece a apoyarle a Sánchez lo del Presupuesto militar y lo de Rota. Todo lo que ha pedido es que el presidente le informe con un poco de detalle de lo que tiene en mente. Claro que va a resultar raro que Sánchez se encomiende a Feijóo después de haber descrito al líder del PP como terminal de intereses oscuros que no quieren el bienestar de los españoles sino de sí mismos.
Intereses oscuros. Feijóo para Sánchez es Darth Vader. El lado oscuro de la fuerza. Claro, ponte a pactar la Defensa nacional ahora con Darth Vader. O la renovación del Consejo General del Poder Judicial. ¿Tú a quien quieres poner, Darth? ¿Yo? Al emperador Palpatine. Qué hacemos con la princesa Leia.
Hay quien dice que Sánchez lo que de verdad quiere ser ahora es secretario general de la OTAN
Lo dicho: la próxima cumbre de la OTAN que organice Sánchez, en el Teatro Romano de Mérida. Dices: ¿es que seguirá Sánchez en el Gobierno cuando a España le toque organizar otra vez una cumbre de éstas? Bueno, es que hay quien dice que Sánchez lo que de verdad quiere ser ahora es secretario general de la OTAN. Como Solana. Que por eso estuvo tan obsequioso con Joe Biden. ¿Dos destructores más, dices, en la base de Rota, Joe? ¿Sólo dos? Pero hombre, que sean veinte.
Lo que sea, pero presidente. Por debajo de eso no le interesa nada
Ardor guerrero, dicen sus socios de Podemos. Que ahora ya van comprendiendo que sus socios de verdad son Macron, Draghi, Scholz, Von der Leyen, Biden. Véte tú a saber si de verdad aspira Sánchez al cargo de generalísimo de la OTAN. O a cualquier otro. Presidente de la Comisión Europea. Presidente del Consejo. Presidente del Banco Central. Lo que sea, pero presidente. Por debajo de eso no le interesa nada.
También le digo que las apetencias de Sánchez son como sus principios, muy cambiantes. Yo, en realidad, creo que a lo que aspira es a ser rey de Marruecos. O sea, hijo de Mohamed VI. Y a lo mejor consigue que lo adopte porque méritos, desde luego, sigue haciendo.