LA PRIMERA DE LA MAÑANA

Marta García Aller: "Después de todo lo que ha pasado, cómo no celebrar este abrazo en el Senado"

Marta García Aller reflexiona en 'Más de uno' sobre una reconfortante escena que ocurrió ayer en el Senado, donde dos políticos valencianos, uno del PP y otro del PSOE, se abrazaron emocionados al recordar la tragedia de la Dana en su tierra.

Marta García Aller

Madrid |

Reconforta ver lo que pasó ayer en el Senado. Tras la trágica riada que ha causado más de 200 muertos y decenas de miles de afectados, andamos necesitados de escenas que reconforten. Y no estamos acostumbrados a que vengan de la política.

El alcalde de Paterna, que también es senador, subió ayer a la tribuna para agradecer la solidaridad con Valencia tras el paso de la dana. Se emocionó al recordar a una vecina cuando quitaba barro en Aldaia. Se acordó de quienes han perdido todo y pidió para ellos cambiar la confrontación política por la unión. Hagan lo que hagan, dijo Antonio Sagredo al resto de senadores, “yo me vuelvo a Valencia para reconstruir 'la millor terreta del mon'". Se le quebró varias veces la voz por la emoción al hablar de la riada, cómo no va a emocionarse el alcalde después de todo lo visto y sufrido estos días. Y mostró en la tribuna una bandera valenciana manchada con barro de Paiporta. Le aplaudieron puestos en pie, sobre todo, los de su partido.

Lo reconfortante vino después. Cuando se levantó otro senador, Gerardo Camps, también valenciano pero del partido de enfrente, del partido que aplaudió poco al alcalde de Paterna porque en estos hemiciclos polarizados sus señorías tienen la mala costumbre de escatimar aplausos según la ideología y la estrategia. Pero ya llega, ya, lo reconfortante.

El senador Camps iba a la tribuna para la réplica a senador del otro partido, da igual de cuál es cuál. Pero antes de eso, atravesó el hemiciclo y se acercó al escaño de Sagredo para abrazarle. Dos políticos valencianos, uno del PP, otro del PSOE, abrazándose en el Senado, después de que a uno se le quebrase la voz acordándose de las víctimas, es reconfortante. Esa voz quebrada y ese abrazo espontáneo reconfortan mucho porque no estaban en el guion. Y si lo más reconfortante que pueden hacer los políticos después de una tragedia es salirse del guión, dice mucho de quien lo está escribiendo.

¿Moraleja?

Después de todo lo que ha pasado, cómo no celebrar este abrazo en el Senado.