Marta García Aller: "Apenas ha entrado en campaña la atención primaria, y eso que su mejora es tan necesaria"

Si cuando anunció en un mitin en Valencia una inversión de 580 millones para atención primaria, el plan del presidente Sánchez era que el tema de la sanidad protagonizara la campaña, no lo ha conseguido. Y si quería arreglar las graves carencias que sufre la sanidad pública, saturada tras la pandemia, no parece una inversión suficiente. A lo mejor porque ni siquiera es novedosa.

Se anunció como la mayor inversión en atención primaria de la historia, pero en realidad ya estaba presupuestada en las cuentas de 2023 y solo faltaba activarla.

Si la dividimos los 580 millones entre las 17 comunidades tocarían a 34 millones. Y si lo dividimos entre los 13.000 centros de salud a 0,04. Hay más críticas. Los médicos de Atención Primaria critican que el dinero llegue sin un plan específico de actuación y sin consenso. El plan está destinado a mejorar las infraestructuras, pero no a contratar más profesionales. Habrá dinero para un ecógrafo nuevo, pero no para quien tenga que manejarlo. Dicen los médicos que son medidas necesarias pero totalmente insuficientes.

Como la sanidad pública es de competencia autonómica, el anuncio es más simbólico que otra cosa. De momento ha servido para acordarnos de José Manuel Miñones, que al verlo ayer en el Consejo de Ministros caímos en que era el ministro de Sanidad. Estaba desaparecido él y el tema de la sanidad. En los últimos meses, hubo tantas manifestaciones y huelgas de médicos. Parecía que la sanidad iba a ser un asunto central de esta campaña, pero no.

Y eso que el problema sigue aquí. El tiempo de espera medio entre la petición y la atención con el médico de familia se ha duplicado entre 2017 y 2022, según un informe de EsadeEcPol. Su diagnóstico es que la inversión sigue siendo baja, las plantillas envejecidas y la especialidad de médico de familia poco atractivapor estar mal pagada y con contratos temporales. Falta un plan ambicioso con más incentivos para la formación, mejores contratos y menos burocracia, para digitalizarla y coordinarla mejor entre comunidades. O sea, que en atención primaria faltan médicos y los que hay se pasan el día haciendo papeleo. Pero ahora tendrán un ecógrafo nuevo.

¿Moraleja?

Apenas ha entrado en campaña la atención primaria, y eso que su mejora es tan necesaria.