'Vietnamitas contra Franco' o la clandestinidad manchada de tinta durante el Franquismo
Con Sergio del Molino entrevistamos a Jesús A. Martínez, autor del libro 'Vietnamitas contra Franco', una obra que recupera la cultura subterránea de resistencia a la dictadura de Franco.
Las "vietnamitas" eran modelos de imprenta casera aún más precarias que la ciclostil. Con ese apodo tan sonoro (vietnamitas) se acabó llamando a las máquinas multicopistas en general "en la jerga de la clandestinidad", cuenta Jesús A. Martínez en su libro 'Vietnamitas contra Franco'. Estas máquinas permitían "reproducir miles de textos de forma rápida, silenciosa y barata".
Este libro supone una obra de referencia sobre parte de la historia de España que corría riesgo de perderse en el olvido. Para Sergio del Molino, recupera "la cultura subterránea de resistencia a la dictadura de Franco" y retrata a un país precario y perseguido.
Buena parte de estos materiales, al ser clandestinos, estaban requisados o desaparecidos. Por tanto, el trabajo que realiza Jesús Martínez en su libro es algo necesario, a través del cual "transporta al olor y a la textura de aquellos años tristísimos".
El origen del libro está en la exposición 'Letras clandestinas, 1939-1976', de la que Jesús fue comisario. Después de todos los materiales recogidos, la exposición tuvo "un efecto multiplicador". Así, de un mundo ocultado y oculto, "llama la atención la envergadura de este fenómeno de cultura escrita", explica Jesús, quien asegura que aún hay muchos materiales que se desconocen.
Las 'vietnamitas', un mapa difícil de trazar
Habitualmente las imprentas clandestinas tenían una localización fijada donde disponían máquinas tipográficas multicopistas, fundamentalmente La Minerva, y, por un tiempo, se pudieron imprimir allí los distintos textos clandestinos. También se imprimían en imprentas legales o incluso bancos, donde los empleados utilizaban las máquinas durante las noches.
"En ese mapa es imposible reconstruir las 'vietnamitas' porque eran móviles, se trasladaban, y podían estar en cualquier sitio", detalla el autor y catedrático de Historia Contemporánea de la Universidad Complutense de Madrid.
Terminología simbólica en la lucha antifranquista
El término "vietnamita" esconde un concepto muy operativo para el mundo de la clandestinidad. En la década de los 50 las octavillas ya se habían convertido en un elemento de propaganda contra las tropas francesas en Vietnam. En los 60, se trata de una terminología simbólica.
Las máquinas "vietnamitas" eran pequeñas y muy caseras, y en esa década se buscó el gran referente contra la lucha antiimperialista de Estados Unidos.Así, "se emuló que la lucha de Ho Chi Minh en Vietnam contra Estados Unidos era como la lucha en España contra Franco", cuenta Jesús.