"Julio es mi papá. El papá que llevo buscando durante toda mi corta y miserable vida", declara el pobre Arturito. Aunque Alsina insiste en que Iglesias no puede ser su padre porque el personaje es de 1913, el pequeño le acusa de cruel, "quiere arrebatarme la única ilusión que da sentido a mi mísera y maltrecha vida, y lo sabes", comenta.
Además, argumenta que "bien es sabido que Julio Iglesias dio comienzo a la humanidad que hoy conocemos, es el Dios Padre, el que empezó lo de 'creced y multiplicaos'". Asimismo, insiste en el parecido físico que tiene con el artista y se anima a demostrar que también tiene el sentido musical de su padre y se arranca a cantar 'Soy un truhan soy un señor'. Por lo que asegura que quiere su dinero, "me pertenece por derecho de sangre. Así saldré de este pozo de amargura e indigencia".
Atendiendo a las peticiones del demandante, se incorpora a la conversación el propio Julio Iglesias, que aprovecha para hacer un alegato para que no le vengan "más niños menesterosos como este" y comenta "como alguien más intente atribuirme su paternidad le voy a poner a parir".
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