El sindicato SAP-FEPOL denuncia el uso de los Mossos como moneda de cambio para formar gobierno

Tras los disturbios de los últimos días que han causado muchos destrozos en Cataluña, Carlos Alsina entrevista en Más de uno al secretario general y portavoz de SAP-FEPOL, Pere García.

Explica que ayer se produjo una reunión de las organizaciones sindicales con Miquel Sàmper, consejero de Interior de la Generalitat, que expresó la voluntad expresa de "quitar a los Mossos d'Esquadra del debate político en el que desde hace muchos días, incluso antes de los disturbios, estamos". Además, destaca el deseo de las organizaciones sindicales de "no ser politizados", aunque señala que desde ciertos sectores no se cesa en este empeño.

"El Parlamento de Cataluña tiene que tiene que promover el aislamiento y el rechazo social de la violencia urbana"

Respecto a la intención del Sàmper de cambiar el modelo de actuación policial, García recuerda que el Gobierno está en funciones y que la persona que debería decidir eso tendría que ser la que se va a poner al frente del departamento en la próxima legislatura. Asegura que el consejero quiere "promover un debate como el que tuvo lugar en 2013" y que acabó con la retirada de las balas de goma.

Asimismo, considera que si hablamos de modelo policial, hay que remitirse a la resolución 476 del Parlamento de Cataluña en la que se indica que esta institución "tiene que promover el aislamiento y el rechazo social de la violencia urbana y de los desórdenes públicos", cosa que, asegura, no se ha producido en ciertos sectores políticos durante los últimos días.

A su vez, García comenta que esta resolución tenía que haber servido también para elaborar una ley catalana del espacio público para "conciliar el derecho a manifestarse con el derecho de los ciudadanos a disfrutar de un espacio público seguro" y ha recordado que el cuerpo está actuando estos días sin material y sin seguridad jurídica.

Presión desde ciertos sectores políticos

Por otra parte, denuncia que existe una gran presión desde ciertos sectores políticos hacia los mossos. "Esa presión se está utilizando como moneda de cambio para formar un Gobierno en la próxima legislatura", detalla. Además, aclara que la CUP tiene que hacer su papel, pero que los partidos que tienen responsabilidad de gobierno tendrían que ser "responsables" y no utilizarles de esa manera. "Me preocupa que, después de una reunión entre grupos políticos que tienen responsabilidad de gobierno con la CUP, se emitan comunicados en los que criminalizan a los compañeros", detalla, y agradece a sus compañeros y a los comerciantes del Paseo de Gracia el enorme esfuerzo que están haciendo por reestablecer el orden público.