María Larrea: "La única obsesión que tenía era saber de dónde venía, quiénes eran mis padres biológicos"
La escritora María Larrea presenta 'Los de Bilbao nacen donde quieren', una novela de un trío de abandonos, de una joven que busca su propia mitología de vida.
"La escritura tiene esa virtud insospechada de provocar reacciones en la realidad", dice María Larrea, autora de la novela 'Los de Bilbao nacen donde quieren'. La suya es una historia -ahora plasmada en las páginas de un libro- detrás de la cual llevaba años de búsqueda, de lucha y de trabajo artístico.
Por ello, cuando su círculo de familiares y amigos que habían seguido de cerca su historia supieron que iba a materializarse en una novela publicada, lo celebraron "como si hubiera ganado el Mundial de Fútbol", cuenta la autora en 'Más de uno'. Y lo cierto es que, después, ha ganado muchos otros premios literarios.
Tras publicar la novela, lo que más le emociona a María es cuando sus lectores se acercan a decirle: "No soy de Bilbao, no soy española, no soy hija de una asistenta, no tengo tu historia, pero me ha conmovido mucho".
Novela de un trío de abandonos
'Los de Bilbao nacen donde quieren' es una novela de un trío de abandonos. De tres seres humanos a los que han abandonado, pero viven juntos. "Son los huérfanos de esta España de posguerra, de dictadura y de transición", explica la autora.
He usado las armas de la literatura para poder contar esta historia
En definitiva, es la historia de la vida de María Larrea. Aunque sean hechos reales, con fechas, lugares e historias de estos tres huérfanos que formaron una familia, es una novela.
"He usado las armas de la literatura para poder contar esta historia. No es un relato, quería que el público tuviera ganas de seguir leyendo estos trayectos de gente tan invisible, pero que para mí eran dignos de grandes obras de ficción, de historias que remueven", argumenta María, quien insiste mucho en que "es una novela aunque sean historias y vidas muy orgánicas y muy reales".
La obsesión por conocer su propia narrativa
La novela parte de un hecho que le ocurrió cuando tenía 27 años: conocer que era una niña adoptada, que su padre y su madre que ella pensaba biológicos eran, en realidad, de adopción.
En ese momento, al enterarse, María sufrió un shock muy grande y, como muchas otras personas adoptadas, "la única obsesión que tenía era saber de dónde venía, quiénes eran mis padres biológicos, cuál era mi historia", recuerda. Al fin y al cabo, trataba de conocer su narrativa, su propia mitología de vida.