Mahabir vive en Nangi y la aldea con conexión más cercana es Pokhara, a dos días andando. Así que cada mes hacía ese recorrido para revisar sus emails. Y estuvo así seis años hasta que soñó con construir una red inalámbrica para conectar a su pueblo. Ante la incredulidad de sus vecinos, Mahabir mandó un email a la BBC pidiendo ayuda, y recibió respuesta.
¿Por qué quieres construirla?, le preguntaron, y les dijo que porque estaban muy lejos. Le preguntaron también con qué contaban y Mahabir les contó que habían construido ordenadores en cajas de madera.
Tras publicar un artículo la cadena británica, Mahabir recibió decenas de correos de gente dispuesta a ayudar. Johann, de Bélgica, y Johnny, de Finlandia se trasladaron a Nangi y se pusieron a ello, construyeron una antena receptora desde una tele antigua y meses después, estaba todo listo. Desde Pokhara comenzaron a enviarles una señal más o menos hacia su ubicación.
“Estuvimos unas dos horas en lo alto de la montaña moviendo la antena en diferentes direcciones, y para nuestra sorpresa, funcionó”. Él logro no suponía sólo poder consultar sus “mails” con más frecuencia sino algo más.
Conectaron su clínica de Nangi con el hospital de Katmandú, lo que permitía comunicarse entre el personal sanitario a través de videoconferencia. Mahabir también ha creado una plataforma de comercio electrónico que ayuda a los vecinos a vender sus productos. Y un colegio donde 350 niños estudian con los últimos avances educativos on line. Ahora sueña con crear una universidad y también con un teleférico que pueda llevar a los habitantes de Pokhara a tocar la nieve que siempre han visto de lejos.