LA BRÚJULA

El monólogo de las ocho: "Si Sánchez conociera el rubor, la de hoy habrá sido la etapa más embarazosa de toda la ronda de presidentes"

Rafa Latorre reflexiona en su monólogo sobre la ronda de contactos de Sánchez con los presidentes autonómicos, que hoy ha llevado a Moncloa a Mazón, López Miras y García-Page.

Rafa Latorre

Madrid |

El monólogo de las ocho: "Si Sánchez conociera el rubor, la de hoy habrá sido la etapa más embarazosa de toda la ronda de presidentes"

Vamos con las noticias, empezando por la agenda del presidente castellanomanchego, que es uno de los protagonistas de la actualidad. Ya ven qué oportuno: mientras nosotros veníamos para aquí, él iba hacia allá. En su condición de presidente de Castilla- La Mancha y no de barón socialista, Emiliano García Page ha visitado a Pedro Sánchez en La Moncloa para hablar de la financiación autonómica y suponemos que para poner el grito en el cielo por el privilegio fiscal que Sánchez ha pactado ya con ERC para Cataluña.

Si Pedro Sánchez conociera el rubor, la de hoy habrá sido la etapa más embarazosa de toda la ronda de presidentes mantenida en La Moncloa para tratar la financiación autonómica. En primer lugar porque con ningún barón popular tiene Sánchez una relación tan tensa como con el único barón socialista que gobierna con mayoría absoluta una autonomía.

Es que Emiliano García Page ha presentado junto a las comunidades del PP un recursos ante el Constitucional por el privilegio fiscal de Cataluña. Al respecto, recuerden esto: si algún Sánchez se decide a expulsarlo del partido, y es algo que no habría que descartar, esgrimirá este argumento, porque podrá demostrar que ha habido una violación de los estatutos del PSOE.

La otra razón por la que esta jornada habrá necesitado cierto cuajo es que antes que Page visitaron La Moncloa los otros dos presidentes de las otras dos comunidades más infrafinanciadas de España. ¿Cómo explicarle al valenciano Carlos Mazón o al murciano López Miras el privilegio fiscal pactado en Cataluña? Pues no es fácil.

Antes les decía que todo esto habría sido duro si Sánchez conociera el rubor, pero es que es alguien capaz de pactar con Bildu, nada menos que con Bildu, la Ley de Seguridad Ciudadana y de permitir que sea una condenada por enaltecimiento del terrorismo, como es Mertxe Aizpurúa, quien anuncie cuáles serán las limitaciones con las que actuarán la policía o la guardia civil.

Lo cierto es que siempre que creemos que este gobierno no puede ir más allá en sus cesiones, va y se supera. Un partido como Bildu, que ha presentado asesinos en sus listas y cuya portavoz dirigía panfletos donde se aplaudia el asesinatos de guardia civiles y policías…

Es normal lo que hoy sienten los colectivos policiales. Su indignación especialmente con el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que dijo que esto nunca ocurriría. Y qué decir del desaliento de las víctimas de ETA, que ven cómo el blanqueamiento de Bildu ha llegado tan lejos como para que sea Bildu quien escriba la Ley de Memoria Histórica y la Ley de Seguridad Ciudadana.

Ya nadie duda de que Nicolás Maduro ha perdido las elecciones en Venezuela y las ha robado. Las conclusiones de un observador imparcial como es el centro Carter habrán convencido a los más escépticos y ya del lado de Maduro quedarán aquellos a los que nada va a convencer. Ni siquiera aunque contaran las actas electorales ellos mismos.

Hoy ha estado en Más de Uno con Carlos Alsina el todavía alto representante de la Unión Europea, Josep Borrel. La Unión Europea no reconoce a Edmundo González Urrutia como presidente electo porque sería preciso que lo hicieran antes los 27 países que la componen, pero al menos Borrell ya habla sin reparos del robo de las elecciones

Esta misma tarde, el ganador de las elecciones Edmundo González Urrutia hacía una promesa bastante inverosímil desde La Toja, porque aseguraba que él estaría el 10 de enero en Venezuela para jurar o prometer como presdidente del país. Es inverosímil porque desde luego hoy media un océano de distancia entre Edmundo González Urrutia y su patria. Y para que eso haya podido ocurrir ha sido fundamental la labor de España, facilitador del exilio forzoso del ganador de las elecciones.

Ya solo los estados paria consideran que esas elecciones las haya ganado Maduro. Pero es no significa que vaya a ser fácil que Edmundo González termine siendo presidente de los venezolanos.

Hoy se ha hablado en el Congreso de los Diputados de la errática política exterior española. Y digo errática no sólo porque se mantenga aparte a la oposición de esta política que debería ser de Estado, sino porque es imposible identificar una regla general de comportamiento diplomático más allá del capricho del momento. Que se lo digan a los saharauis que llegaron a España buscando un refugio y fueron expulsados. ¿Por qué hay en Ciudad de México aún un embajador y en Buenos Aires la retiramos?

En cuanto a lo de Venezuela, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, ha insistido en pedirle explicaciones a la oposición en lugar de ofrecer él las suyas. Cuando hasta los países menos dudosos de un alineamiento derechista, como Brasil, ya se han quejado del papel de facilitador que España ha jugado para el exilio forzoso del ganador de las elecciones, Edmundo González Urrutia.

Y otra declaración muy significativa de hoy. El mejor embajador que tiene España en el mundo pero especialmente en Iberoamérica, el Rey Felipe VI, se ha referido de forma muy elocuente a las relaciones de España con los países americanos. Son las primeras palabras después de haber sido excluido de la toma de posesión de la nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum, que ha aterrizado en el cargo con ridículas afrentas precolombinas.