El cuaderno de Chapu: El Ministerio de Igualdad se parece un poco a la Casa de Bernarda Alba
El cuaderno de Chapu Apaolaza con las notas que ha apuntado del día
Traigo las nota de este veinte de abril, te acuerdas aquella noche en la cabaña del turno, las risas que nos hacíamos antes todos juntos, y hoy el PSOE ha votado la reforma del Sí es Sí y el Ministerio de Igualdad se parece un poco a la Casa de Bernarda Alba. Una de las cosas peores de la nueva política es la intensidad, los golpes de pecho, ese absoluto como de diván de psicoanalista, qué cansancio. Prefería a los políticos a los que todo les daba igual.
De Irene Montero se apodera una cosa trágica como de vibrato en la barbilla y ojos inyectados en sangre. Es un día triste, ha dicho. Un día triste para las mujeres que estaban encantadas con que sus violadores salieran a la calle. Un día triste para las mujeres de Podemos del Ministerio de Igualdad, concretamente, que llegaron con ecos de alegres vestales, afterwork y campanillas en fiestas de tarta y japiberdei de ministerio y hoy parecen las Hermanas izquierdo. Porque del lío del amor libre les entró la fiebre contra los hombres y parecía que iban capando a la gente y ahora andan en una cosa negra como de las hermanas izquierdo de Puerto Hurraco. La cosa se empezó a joder cuando la izquierda perdió la alegría, porque donde estaba la izquierda había eco como de verbena y ahora solo se escucha a Pam diciéndote cómo hacer el amor decentemente y a José Félix Tezanos con los salmos de la demoscopia de un nuevo tiempo.
En la izquierda hoy no estaba ni Sánchez. Se había ido a Doñana a disimular que el PSOE había votado con el PP. Si al menos hubiera votado con Bildu.