El cuaderno de Chapu: El consenso, o lo que surja
Chapu Apaolaza escribe en su cuaderno sobre la reunión de Pedro Sánchez con Alberto Núñez Feijóo en su primer encuentro tras ser nombrado presidente del grupo popular.
Traigo las notas del 7 de abril, solecito y melancolía de la grosse coalitionen. Hasta las hijas de Putin sabían que hoy se reunía Sánchez con Núñez Feijoo, y es que al líder ruso le salen más hijos secretos que al Platanito el torero. Se sabe porque unos biógrafos le hicieron una biografía que llevaba por título: “Retrato asombrosamente franco del presidente ruso Vladimir Putin”.
Yo de Putin no me atrevo a decir nada porque me recuerda a Balbo el de Gades, que mandó representar una obra de teatro con su vida, y, como no le gustó, mandó matar al actor. Ahora que no nos oyen en la embajada y que solo bebo cerveza de lata, las hijas de Putin que se sepa, son de una relación con una azafata de avión. Ahora te enteras de que la mujer de Putin te ha servido zumo de tomate en un avión y te entra una cosa por dentro: "No, muchas gracias, señora, es muy amable. No beberé nada hasta aterrizar dentro de 18 horas en Sídney".
Yo venía a hablar de que ha sido templarse la primavera y reunirse el presidente del Gobierno y el líder de la oposición. Alberto Núñez Feijoo, que acude a la cita vestidito de consenso.
Han quedado para dejar de lado los intereses particulares y favorecer un nuevo y necesario consenso para España, o lo que surja. El problema de Núñez con Sánchez es que Sánchez ha engañado a tanta gente que el que acuerda con él sale engañado de casa, pero qué le vamos a hacer. Las misiones más encomiables son a menudo las más estériles.
Se trata de comenzar un proceso en el que ofrecer puntos de consenso para llegar un acuerdo o bien con el tiempo, dejar claro que Sánchez no quiere negociar o que incumple su palabra, que son dos cosas que ya sabíamos antes de empezar.