Las sombras que planean tras 25 años del acuerdo del fin del IRA
En el 25 aniversario del acuerdo de Viernes Santo, analizamos cómo es la situación actual con Rogelio Alonso, autor de "Matar por Irlanda. El IRA y la Lucha Armada"
Tal día como hoy, pero hace (casi) 25 años, se firmó un acuerdo que puso fin a décadas de violencia en un territorio que, hasta entonces, parecía abocado al desastre. Hablamos de los Acuerdos de Viernes Santo, con el que se “oficializó” el fin del conflicto armado en Irlanda del Norte.
Decimos “se oficializó”, porque los acuerdos no acabaron, ni mucho menos, con toda la violencia, pero indudablemente mejoraron la convivencia entre católicos y protestantes -aunque no exenta de tensiones- y transformaron Irlanda del Norte gracias a la inversión externa, el comercio, el turismo, etc. Aumentando la prosperidad, la esperanza de vida e incluso la llegada de nuevos residentes.
No vamos a reseñar aquí cómo se forjaron esos acuerdos (necesitaríamos unos cuantos programas de radio como éste), pero sí nos preguntamos por el presente y el futuro de ese proceso, que ha sido elogiado en todo el mundo, y cuya firma fue calificada como “el día del triunfo del coraje”.
Aunque aún, 25 años después, planean muchas sombras. Por ejemplo: el pasado marzo las autoridades británicas elevaron la alerta terrorista para Irlanda del Norte, lo que implica que la posibilidad de que se produzca una ataque terrorista pasó de "probable" a "muy probable".
Rogelio Alonso, catedrático de Ciencia Política y director del Máster en Análisis y Prevención del Terrorismo de la Universidad Rey Juan Carlos y autor del libro “Matar por Irlanda. El IRA y la Lucha Armada”, explica la situación en La Brújula: "No están cerradas las heridas. Es muy preocupante lo que ha ocurrido estos 25 años. La violencia no ha desaparecido y hay indicadores muy preocupantes. Las encuestas de opinión indican que la mayoría de la población norirlandesa señalan que no había otra alternativa a la violencia de la IRA. Se ha legitimado la violencia terrorista en lugar de deslegitimarse y esto es un indicador muy importante de lo que ha pasado"
"Es desconcertante porque durante los años del conflicto los norirlandeses nacionalistas, la mayoría no apoyó la violencia del IRA. Es en estos 25 años de paz en los que se ha revertido la situación", añade.
Y otro de los agravantes de la situación es el sentimiento de simpatía hacia la IRA: "El acuerdo muchas veces se presenta como una medida valiente del IRA. Muchos jóvenes no ha tenido conocimiento de la violencia del IRA. Hay una continuidad entre una y otra violencia. Se les ve con una cierta simpatía y no se expone la realidad de todo lo que han estado implicados. En el libro hay hijos que critican a sus propios padres del IRA".