Territorio Negro: El crimen perfecto... jugando a matar al hermano de King Jong-un
Manu Marlasca y Luis Rendueles nos cuentan en el Territorio Negro de Julia en la onda la historia de un crimen... casi perfecto.
Muchos oyentes del territorio negro de Manu Marlasca y Luis Rendueles les han preguntado si existe el crimen perfecto. Ellos han contestado como han podido. Y ahora otro oyente les ha sugerido un ejemplo de crimen perfecto, impune, casi una obra maestra del asesinato.
Uno de los personajes de Extraños en un tren propone a su compañero de vagón cometer los crímenes en nombre de otro. En la película, basada en la novela de Patricia Highsmith se da un argumento que es cierto. Matar a un desconocido hace mucho más difícil el trabajo de la policía para encontrar a un culpable. Pero hoy, y gracias a este oyente vamos a darle una vuelta de tuerca a este concepto de crimen perfecto, y tenemos que darle la razón.
Un crimen es mucho más difícil de esclarecer cuando quien o quienes lo cometen ni siquiera saben que están matando, como ocurrió en el aeropuerto de Kuala Lumpur, Malasia, el 13 de febrero de 2017 con dos jóvenes aspirantes a actrices o famosas y nada menos que Kim Jong Nam, el hermano mayor díscolo del dictador de Corea del Norte, Kim Jong Un. El hermano del dictador de Corea del Norte va a coger un avión el 13 de febrero de 2017 en el aeropuerto de Kuala Lumpur. Va a morir allí. Y quienes lo matan no saben lo que están haciendo.
Eso es. Kim Jong Nam va a tomar un avión de regreso a Macao, donde vive exiliado. Era el hijo mayor del dictador Kim Jong Il, estaba destinado a gobernar Corea del Norte, pero fue cayendo en desgracia, parecía tener debilidades occidentales, digamos. Y acabó perdiendo su condición de heredero después de que le pillaran yendo con su familia y sus hijos a Disneyland en Tokio, en el año 2001. Desde entonces vivía digamos vigilado, había criticado el régimen de su hermano y algunos medios hablaban de que podía estar colaborando con la CIA, la agencia de espionaje de Estados Unidos.
Y este hombre está esperando en la terminal de Salidas del aeropuerto de Kuala Lumpur. Hay cámaras de seguridad por todas partes. Y graban lo que sucede. En apenas dos minutos.
Morirá apenas veinte minutos después de recibir dos abrazos
Se ve a una mujer joven. Lleva pantalones vaqueros y una sudadera gris. Avanza por detrás hacia Kim Jong Nam. Le agarra la cabeza y poco después le suelta. Se va. No pasa ni un minuto cuando otra mujer que lleva una sudadera hace lo mismo, abraza por detrás al hermano del dictador de Corea del Norte y le tapa los ojos con las manos. Esta mujer también se va. Las imágenes la muestran sacudiendo las manos y metiéndose en un cuarto de baño del aeropuerto para lavarse.
Las imágenes muestran a Kim Jong Nam que acude a los servicios de seguridad del aeropuerto. Habla con varias personas y les explica lo que le ha ocurrido. Parece aturdido, está cojeando. Lo llevan hacia el Centro Médico del aeropuerto, donde morirá apenas veinte minutos después de recibir los dos abrazos de las dos mujeres.
Muy pronto, la policía va a detener a esas dos mujeres jóvenes. No se han escapado, ni se han escondido en realidad. No son delincuentes, no son asesinas, o al menos ellas pensaban que no lo eran. Y, como en la película de Hitchcock, no conocen a la persona que acaban de matar
Son dos mujeres de países distintos incluso, que no se han visto en su vida, hasta que las meten en una celda. La primera se llama Siti Aisyah, tiene 25 años y nació en Indonesia. Lleva unos cinco años viviendo en Malasia y últimamente trabajaba en el hotel Flamingo. Oficialmente como masajista, pero en realidad era prostituta y ofrecía finales felices a los clientes.
La otra detenida se llama Doan Thi Huong. Tiene 28 años y nació en Vietnam. Trabajaba de camarera en Hanoi y su sueño era ser famosa, preferentemente actriz o cantante. Incluso había conseguido salir en uno de esos programas televisivos de cazatalentos en su país, llamado Vietnam Idol.
La autopsia de la víctima, recordemos el hermano del dictador de Corea del Norte, revelará algo terrible. Le han matado, untándole en la cara una variante del gas nervioso VX, un agente letal, prohibido por Naciones Unidas incluso en guerra.
Eso es. Es uno de los agentes nerviosos fabricado por el hombre, en este caso en Inglaterra, en los años cincuenta, en plena guerra fría. Es parecido a los pesticidas, pero muchísimo más letal, y se utiliza en ataques de guerra química, por ejemplo en Siria. Basta una centésima de gramo de VX, menos de una gota en contacto con la piel humana para matar a una persona. Parece como aceite, aunque de color ámbar, no sabe a nada, tampoco huele a nada. Si el VX entra en contacto con la piel, se produce dolor en los ojos, visión borrosa, opresión en el pecho, naúseas, vómitos y la muerte en pocos minutos
Y como una prostituta y una aspirante a cantante consiguen tener un gas nervioso letal, prohibido por Naciones Unidas, qué dicen ellas cuando están ya detenidas?
Ambas han sido captadas para un crimen casi perfecto, en una operación de Inteligencia. Han sido agentes “de una sola vez”, desechables, cabezas de turco. Siti, la primera mujer que abrazó por detrás a Kim, explica que una noche que estaba algo triste, uno de los taxistas que conocía por el trasiego de clientes al hotel le dijo que había un hombre que estaba buscando actrices para un programa de televisión, se trataba, le dijo, de uno de esos programas de bromas, de cámara oculta, de hacer gamberradas más o menos sutiles a desconocidos y emitirlas.
Y ella aceptó participar en ese supuesto programa de bromas en televisión. Sí. Su amigo taxista le presentó a un hombre que dijo llamarse James. Se presentó como un productor japonés de televisión. Le hizo incluso un casting o una prueba. Le pidió asaltar a una mujer desconocida y embadurnarle la cara con aceite solar para bebés. Siti lo hizo bien y cobró 96 dólares por la broma grabada. Lo hizo varias veces más durante un mes, aunque su primer jefe, el tal James, había desaparecido y había llegado a sustituirlo un tal Mister Chang. En realidad, la estaban preparando para la broma final, el asesinato.
La segunda mujer, la segunda asesina, vivía en Vietnam. La reclutaron y la llevaron hasta Malasia, hasta el lugar del crimen, también con el cebo de un programa de televisión con el que podría hacerse famosa?
Sí. Doan era una camarera de 28 años. Sus padres eran campesinos y ella estudió contabilidad. No encontró trabajo de lo suyo y quería ser actriz. Era muy activa en redes sociales, donde se hacía llamar Ruby Ruby. Lo que contó ella fue que un amigo la llama y le preguntó si querría aparecer en un video de bromas para un futuro programa de televisión. Ella aceptó y acudió a una cita en un bar de Hanoi, allí se presentó un tal mister Y que le preguntó cuánto dinero quería cobrar por trabajar durante un mes haciendo bromas a desconocidos para un programa de cámara oculta. Ella se tiró un farol y respondió que mil dólares y, ante su asombro, el señor Y le dijo que estupendo.
Desde ese momento y también durante un mes, viajó a distintas ciudades y estuvo ensayando gansadas y bromas de cámara oculta por ejemplo en un supermercado. En una entrevista con un programa de la televisión japonesa, explicó que el señor Y la había llevado de compras por la zona cara de Hanoi, que le había regalado una chaqueta rosa y también le había hecho regalos por Navidad. Al principio, la broma que debía hacer era dar un beso a un desconocido. Luego cambian a lo de tapar los ojos. El 11 de febrero, la llama el supuesto manager y la cita en el hall de la terminal de salidas del aeropuerto. Le dijo que iba a ser un vídeo importante y que se iba a publicar en youtube.
Y llegamos al día de la que iba a ser la broma definitiva, el 13 de febrero de 2017, el día que iban a matar al hermano del dictador de Corea del Norte. Las dos jóvenes se encuentran en el lugar del crimen?
No se ven, ni siquiera un minuto. Siti celebró su cumpleaños la tarde antes, en el Hard Rock Café de Kuala Lumpur y durmió en un hotel cerca del aeropuerto, pagada por sus supuestos jefes de la productora de televisión. Una cámara de seguridad la muestra con un oso de peluche enorme en brazos, luego ella contó que se lo regalaron para que fuera ensayando la broma del día siguiente.
El 13 de febrero el señor Chang había citado a Siti en la cafetería del aeropuerto. Allí le explica que habría otra mujer que ayudaría en la broma del día y le señala lo que tiene que hacer. Le dijo que apartara la vista y le echó en las manos algo como aceite. Entonces señaló a un hombre calvo, oriental, que caminaba por el vestíbulo y le dijo debía hacerle la broma a él. Tenía que acercarse por detrás y taparle los ojos, la típica broma de ¿Quién soy? Luego, debía irse, sin más.
Y menos de un minuto después llega la otra chica, Doan, que hace lo mismo con Kim Yong-nam. Se le acerca por detrás y vuelve a taparle los ojos. Luego, se ve como esta chica se va al servicio a lavarse las manos.Y hay una prueba que habla en su favor. Doan lleva una camiseta con grandes letras que ponen LOL, son las siglas que ponen los jóvenes en mensajes de whatsapp y otras redes que significa Reirse en voz alta. Sería un mensaje para ese supuesto programa de televisión de cámara oculta donde ellas estaban convencidas de que estaban participando.
El hermano del dictador de Corea del Norte muere veinte minutos después en el aeropuerto. Tras estudiar las grabaciones de las cámaras de seguridad, las dos mujeres son detenidas, una en su puesto de trabajo en el hotel Flamingo, la otra al día siguiente, en el aeropuerto, donde la ha vuelto a citar el fantasmal Mr Chang, aunque, claro, este hombre no ha acudido.
La investigación da frutos muy pronto. Se comprueba que en el momento del asesinato había al menos cuatro ciudadanos de Corea del Norte allí, en la terminal. Los cuatro se cambiaron de ropa después de ese incidente, cruzaron los controles migratorios y salieron del país.
La autopsia indicó que había sido un asesinato producido al mezclarse los dos liquidos que las mujeres echaron en la cara de Kim. Por eso ellas no sufrieron daños. Es una variante letal del gas VX. La policía malasia logró localizar a un químico llamado Ri Jong Chol, sospechoso de fabricar el gas, y lo detuvo, lo mismo que a otros tres ciudadanos de Corea del Norte.
Y aquí empieza a desvelarse quién está detrás de este crimen perfecto. Corea del Norte detiene a cinco ciudadanos de Malasia, como un chantaje
Y consiguen lo que quieren. Malasia libera al químico coreano, por cierto lo vieron tiempo después cantando feliz en un karaoke, y a los otros norcoreanos. Corea libera entonces a los cinco ciudadanos malasios. Y en la cárcel quedan las dos jóvenes aspirantes a actriz, que van a ir a un juicio donde se le puede pedir hasta pena de muerte. Curiosamente, sus dos países, Indonesia y Vietnam, las defienden y ponen abogados muy buenos, y muy caros, para que salgan bien paradas.
Siguen ocurriendo cosas extrañas. El juicio empieza en octubre de 2017, pero se aplaza, y se reanuda en el año 2019
La acusación, la fiscalía, retira todos los cargos contra una de las dos, Siti, que queda en libertad y regresa a su país, Indonesia, convertida en un personaje famoso. Doan, la joven de Vietnam, sigue un tiempo más en la cárcel, pero poco después dejan de acusarla de asesinato, ya sola la acusan de un supuesto delito de lesiones. La joven admite ser culpable, llevaba ya dos años encerrada en la cárcel, con lo cual ya había cumplido su condena. Quedó en libertad el 3 de mayo de 2019, hace ahora casi dos años. Ella también regresa a Vietnam convertida en una celebridad.
Y claro, de los ciudadanos de Corea del Norte que las engañaron y las utilizaron no se ha vuelto a saber nada
Ellas dieron los nombres que utilizaban, incluso Doan dio una entrevista a una televisión japonesa en la que señalaba los rostros de dos de ellos y decía sus nombres, pero parecen sacados de una película de Quentin Tarantino. El señor Y griega, James, el tal Mr Chang y el supuesto jefe de todos ellos, que se presentó ante una de las chicas como el señor Hanimoni, el coordinador. Cada chica fue captada y trató con un grupo de cuatro agentes. Todos están desaparecidos después de ese episodio tan turbio del que pensamos que nunca sabremos la verdad. Corea del Norte, por cierto, ha negado siempre cualquier conexión con el asesinato del hermano de su querido líder, como le llaman. Hay un magnífico documental disponible en la plataforma Filmin sobre toda esta historia. Se llama Assessins (Asesinas) y lo ha dirigido Ryan White.
Todo lo que rodea Corea del Norte es un enigma, y no solo lo que ocurre en ese país, sino episodios que de vez en cuanto llegan a otros lugares, incluido Europa, incluido España.
El 22 de febrero de 2019, un grupo de personas entraron en la sede de la Embajada de Corea del Norte, a las afueras de Madrid, y retuvieron a varios empleados. Se llevaron material informático y documentación. Todo indica que eran un grupo disidente, avalado o entrenado por la CIA, y que trataban de sabotear la incipiente y extraña relación entre el dictador de Corea del Norte y el presidente entonces de Estados Unidos, Donald Trump. España ha reclamado a Estados Unidos la extradición de un ex marine implicado en el asalto, un tal Adrian Hong. Por cierto, este espía o lo que sea, escapó de la embajada pidiendo un uber a nombre del señor… Osvaldo Trump. Seguimos esperando noticias de los americanos. Ojalá que en otro territorio negro podamos contar la verdad de esa historia o, al menos, una parte.