Los asesinatos llevados a cabo por niños "no inocentes"
En 'Territorio Negro', hablamos con Manu Marlasca a propósito del 'Día de los Inocentes', sobre algunos de los asesinatos más crueles llevados a cabo por niños
En el día en el que se conmemora la inocencia en el 'Día de los Inocentes', Manu Marlasca nos trae a 'Territorio Negro' algunos casos de asesinatos a niños llevados a cabo por otros niños, como el de Derrick Robie, de 4 años, en un campamento de verano en Nueva York a manos de Eric M. Smith, quien lo estranguló, golpeó con una roca de 12 kilos en la cabeza y abusó de él con un palo en agosto de 1983.
La confesión del crimen se produjo 6 días de después, lo que provocó que Smith pasara 27 años en prisión hasta el pasado octubre, cuando fue liberado tras ocho peticiones de libertad sucesivas a lo largo de los años. El joven, que padece un trastorno explosivo intermitente, fue presuntamente acusado por sus compañeros y sus padres por "tener las orejas de soplillo", confesó haber disfrutado con la ejecución del crimen.
Mary Bell, 11 años
Hablamos también del asesinato llevado a cabo por Mary Bell, nacida en Inglaterra en 1957 e hija de una prostituta que la tuvo con 15 años. Desde muy pequeña, la niña sufrió, presuntamente, abusos por parte de su madre, que la intentó matar.
El día de su 11º cumpleaños, Bell estranguló a Brian, de 3 años, y le asestó un navajazo en estómago y en los genitales. La joven fue condenada a prisión indefinida, pero tan solo estuvo en prisión 12 años, tiempo en el que su madre aprovechó para vender su caso.
Alyssa Bustamante, 15 años
Otro caso de niña no precisamente muy inocente fue el de Alyssa Bustamante, nacida en Misuri en 1994 y con unos padres adolescentes, drogadictos y convictos. Desde pequeña fue criada por sus abuelos y sus tres hermanos menores y sufrió trastornos desde muy joven.
Con 15 años, cavó dos tumbas cerca de su casa y utilizó a su hermana pequeña como cebo para atraer a Elizabeth y, posteriormente, estrangularla, apuñalarla, degollarla y enterrarla . Fue condenada a cadena perpetua y con los años, mostró su arrepentimiento alegando que "si pudiera dar mi vida para devolverles a su hija, lo haría".