Aunque Rafael Amargo nació sietemesino, todo lo ha hecho prematuramente, con 15 años se independizó: ''Yo sabía lo que quería, siempre lo he tenido claro, sabía que quería ser artista y lo bueno es que tuve la ayuda de mis padres''. Ha estado en Madrid, Tokio, Nueva York, a los 22 creó su propia compañía de baile y a los 33 ha vuelto a España y tiene la agenda llena de proyectos.
Los días 12 y 13 de julio estrena Alaire en el Teatro Alcúdia (Mallorca) donde fusiona las danzas urbanas, lo compaginará con Ópera y Flamenco. El espectáculo cuenta con el apoyo del programa Platea del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, en cuanto a este organismo Amargo afirma que existen ciertas acciones que ayudan a ciertas personas: ''ha servido para callar muchas bocas, si eres mediático para las foto si te quieren, pero para trincar no tanto''.
En cuanto a su participación en el programa de Telecinco ''Mira quién salta'', Amargo asegura que dentro de su personaje crear ese tipo de provocación es necesaria: ''con eso me mantengo presente, tengo una compañía de 31 personas trabajando para mi y al salir en la televisión lleno las salas y puedo pagar a mis empleados''. Aunque afirma que a él le respetan como artista porque tiene una larga trayectoria profesional.
Entre sus planes de futuro está la realización de un documental llamado ''Barcelona Flambeada'' donde enseñará diferentes localizaciones de Barcelona. No es la primera vez que hace un documental ya que Amargo dirigió El amor amargo de Chavela. Por último, Rafael Amargo, ha dejado claro que le encantaría hacer radio: ''es uno de los medios informativos que más me gusta, y acabare por hacer radio''.