El próximo 20 de mayo termina la elección de plaza de los MIR, los médicos que empiezan a recibir formación en una especialidad concreta. El procedimiento se ha realizado, al igual que el año pasado, exclusivamente a través de medios telemáticos para evitar aglomeraciones, algo que no acaba de convencer a los aspirantes.
Lo mismo ocurre con el EIR, el proceso de adjudicación de plaza de los futuros enfermeros, que en su caso, terminó el pasado 29 de abril. En 'Julia en la Onda', hablamos con los representantes de ambos colectivos: Érika Brenlla, presidenta de la Asociación MIR de España y residente de 3º año en Neumología , y Sandra Villanueva, presidenta de la 'FSE (Formación Sanitaria Especializada) Unida'.
Ambas coinciden en que esta forma de adjudicación va en contra de la igualdad, la justicia y la transparencia, "porque se trata de una oferta de plazas demasiado grande como para rellenar todas las opciones y sin margen para ningún tipo de modificación".
En medicina se ofertan 8.100 plazas en unos 200 hospitales, y, a diferencia del año pasado, en este curso los candidatos sí pueden hacer una pequeña consulta los días de antes para ver las plazas que quedan, "aunque sigue siendo muy difícil porque son cientos las que están disponibles".
En enfermería la situación es similar, aunque, a diferencia de las plazas MIR, el EIR no contó con el fallo del Tribunal Supremo que permitiese elegir de forma presencial. Sin embargo, tras reunirse con el ministerio de Sanidad, y según nos cuenta Sandra, "conseguimos reducir la lista de 2.000 plazas a turnos de 400 personas, aunque la diferencia de información que tiene el último de un turno y el primero del siguiente es muy injusta".
Entre las especialidades más afectadas por este sistema de adjudicación son aquellas "que se escogen más tarde y que tienen mayor oferta, aunque puede ocurrir en especialidades que se acaben pronto".