Eva Nogales, biofísica: "Hay gente que realmente debería haber sido premio Nobel y se muere sin llegar a tenerlo"
La doctora Eva Nogales es un referente a nivel mundial en el campo de la biología estructural, que permite avanzar en el funcionamiento más básico de las células. Tras recibir el Premio Shaw de Ciencias de la Vida este año, su nombre comienza a aparecer en las quinielas del Nobel.
Sir Run Run Shaw, un magnate de las comunicaciones hongkonés, creó en el año 2002 el premio Shaw para galardonar a los científicos que hayan realizado importantes contribuciones al conocimiento humano; conocido como el "Premio Nobel Oriental", 1 de cada 7 galardonados con esta relevante distinción termina por obtener el premio Nobel de manos de la Academia Sueca.
De Colmenar Viejo a Berkeley
El pasado año 2023, la doctora Eva Nogales recibió este galardón en la categoría Ciencias de la Vida, por el cambio de paradigma que en el mundo de la biología están generando sus investigaciones sobre el funcionamiento de las estructuras más básicas de las células. Aunque ahora es profesora en la Universidad de Berkeley e investigadora en el Instituto Howard Hughes, Nogales nació en el seno de una familia humilde de Colmenar Viejo (Madrid) y estudió en la Universidad Autónoma de Madrid.
Gracias a su talento y esfuerzo, Nogales consiguió elaborar su tesis en el extranjero y terminar trabajando en una de las mejores universidades de Estados Unidos, consiguiendo acceder además a la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos. La profesora ha visitado el programa de Julia Otero para hablar acerca de su trayectoria y su trabajo. "Me da mucho orgullo el haber trabajado con la gente que hizo ese trabajo en mi laboratorio, y ser un equipo tan potente", explica la científica, que afirma haber acogido el premio Shaw "con muchísima alegría".
El apoyo imprescindible de sus padres
En la trayectoria de Nogales han tenido una gran influencia sus padres, dos hijos de la posguerra que tuvieron que trabajar de adolescentes como pastor y bordadora, y que desde el principio trataron de ofrecer a sus hijas la oportunidad de cursar los estudios a los que ellos nunca pudieron acceder.
"Yo creo que ellos siempre tenían unas expectativas muy altas de donde yo podía llegar", ha declarado la doctora, que afirma que sus padres pudieron experimentar el gran orgullo de tener una hija que ha alcanzado el éxito científico: "Lo disfrutaron conmigo", ha declarado Nogales, que casi se emociona al afirmar que su padre, fallecido hace unos años, sigue muy presente en su día a día y en el transcurso de su carrera: "Lo siento muy partícipe de lo que está pasando ahora".
La doctora explica que sus padres entendían con dificultad su trabajo: "Saben que también estoy haciendo algo que es bueno para la humanidad", ha declarado Nogales, que fue nombrada hija predilecta de Colmenar Viejo, que ahora posee una calle en honor de esta reputada científica.
¿En qué consiste el trabajo de Nogales?
El trabajo de Nogales se desarrolla ene un campo muy complejo: la biología estructural, una rama de la biología molecular que trata de obtener las estructuras de los componentes de las células, como las enzimas, las moléculas y el ADN. Tal y como ha explicado Nogales a Julia Otero, sus investigaciones tratan de desvelar los secretos de la expresión genética.
¿Qué significa esto? Todos los componentes de nuestro cuerpo poseen el mismo genoma - definido por nuestro ADN-, si bien cada parte de nuestro organismo tiene una función diferente: esto es posible gracias a que cada parte "lee" solo una parte del genoma para especializarse y realizar su función. Entender estos procesos de lectura y manifestación de los genes en los órganos "es como entender las bases naturales de la vida", ha explicado Nogales.
En el transcurso de sus investigaciones, Nogales se ha convertido en un referente de la criomicrospia electrónica, una técnica de visualización de la estructura de las células mediante la irradiación de protones, que permiten generar millones de fotos de las proteínas y otros elementos que después deben ser procesados por superordenadores.
Las células deben ser congeladas a 180 grados bajo cero para no ser dañadas por los protones; gracias a esto, Nogales y sus colegas pueden tratar de entender los procesos que realizan las células, y así "dar identidad al complejo sistema de tejidos que definen cada organismo". Tal y como ha explicado la investigadora, entender estos procesos puede contribuir a identificar las raíces moleculares de algunas enfermedades, para mejorar los fármacos que actúan sobre las proteínas o las enzimas y "ayudarte con ello a entender qué es lo que ocurre cuando las cosas van mal".
¿Futuro premio Nobel?
Sobre la posibilidad de recibir el Premio Nobel después de ser reconocida por la Fundación del Premio Shaw, Nogales no parece tener muchas expectativas: "El premio Nobel puede llegarle a quien hace este tipo de trabajos a este nivel o puede no llegarle", afirma la investigadora, que añade: "Hay gente que realmente debería haber sido premio Nobel y se muere sin llegar a tenerlo". "No vivimos pensando en que nos tienen que dar el premio Nobel", ha afirmado la investigadora, que opina que el valor de estos premios reside en la atención social y mediática que generan, y que permite entablar un debate público sobre la ciencia y la investigación.
La biofísica, que ha desarrollado la mayor parte de su carrera fuera de nuestro país, afirma que los investigadores españoles no tienen las condiciones que hay en Estados Unidos, y reclama que nuestro país existe "un sistema que apoye y valore al científico, y que vea la ciencia como un proyecto a largo plazo".