Carlos Lesmes cree que la ruptura unilateral de la convivencia traspasa los límites de la honestidad democrática. También dijo el presidente del Tribunal de Supremo que fuera de la ley no hay libertad sino solo frustración. Por su parte, Consuelo Madrigal, la fiscal general del Estado, ha avisado de que la Fiscalía “ha actuado y actuará siempre ante el Tribunal Constitucional y, llegado el caso, ante los tribunales penales, si sigue el desafío al Estado de derecho”.
Con esas advertencias recién pronunciadas, precisamente en Barcelona, recibimos en JELO al jefe del gobierno catalán, Carles Puigdemont, el mismo día en que ya sabe, por cierto, que la CUP va a darle su confianza en el pleno del Parlament previsto para el 28 de septiembre. Hay muchas cosas que preguntarle.